La Dirección General de Tráfico ha publicado por primera vez en su historia la ubicación de los radares móviles situados en los tramos peligrosos de las carreteras de Castilla y León y Asturias y que son 29 en la provincia de Zamora (en el listado oficial aparecen 30 pero hay uno repetido).

Por lo general se trata de tramos bastante largos, por lo que es difícil inferir de la información de la DGT dónde puede estar situado en radar. Así carreteras como la N-122, la N-525, la N-631 o la N-630 están prácticamente completas. Lo mismo ocurre con las principales vías autonómicas, por ejemplo de Zamora a Villalpando, Zamora-Segovia, la que une la capital y Bermillo de Sayago o las que cruzan transversalmente el sur y este provincial, como Fuentesaúco-Bóveda o Fuentesaúco- Villamor de los Escuderos.

Pero también figuran tramos mucho más precisos, como por ejemplo el de poco más de tres kilómetros que discurre entre la N-VI y Villabrázaro, el de poco más de siete kilómetros entre la N-630 San Cebrián y Piedrahíta de Castro, la carretera que une Benavente con Manganeses de la Polvorosa, la de Toro a Cuéllar, la carretera de Cubillos, cercana a la capital o la vía de unión de Manzanal del Barco a Carbajales de Alba.

La información sobre radares móviles completa a la de los fijos, en la A-6, A-52 y N-630.