La fragmentación del voto ofrece un panorama electoral mucho más plural en la futura representación provincial en las Cortes de Castilla y León. En todos los territorios de la Comunidad, salvo en Soria, se incorporarán nuevas formaciones, si bien el PP será de nuevo la fuerza más votada en cada una de las provincias, una tendencia en la que coinciden con los socialistas.

De hecho, los populares obtendrían su mejor resultado en Zamora, donde alcanzarían el 46 o 47 por ciento de los votos, que supone una reducción de siete u ocho puntos respecto al actual. En Zamora se disputan un representante tres formaciones: el PP, Podemos y Ciudadanos. En esta circunscripción, el escenario estaría abierto, aunque caracterizado por la fortaleza del PP que pese a perder entre siete y ocho puntos (pasa del 54 por ciento al 46-47 por ciento) podría mantener su actual representación o bien perder un procurador. El PSOE mantendría sus dos actuales, con el 21 o 22 por ciento de los votos, en tanto que Podemos y Ciudadanos, con una intención de en torno al 10 por ciento, disputan a los 'populares' el escaño en liza.

El sondeo de Sigma Dos para la agencia Ical, realizado entre el 12 y el 14 de marzo con una muestra de 2.200 entrevistas, revela que, pese a mantenerse con un porcentaje de voto cercano al 40 por ciento, el PP sólo lograría mantener con claridad la representación en Palencia y Soria, donde conservarían sus actuales escaños (cuatro y tres, respectivamente). Por el contrario, destaca la pérdida de escaños en Valladolid, donde se dejaría entre tres y cuatro procuradores desde los nueve que tiene en la actualidad. Asimismo, perdería dos asientos en Ávila, donde pasaría de cinco a tres, y en León, donde los ocho actuales quedarían reducidos a seis. En Burgos y Salamanca los resultados de Sigma Dos abren una horquilla de pérdida de entre uno y dos diputados autonómicos (en ambos casos podrían obtener cinco o seis, frente a los siete actuales), mientras que en Segovia se dejarían un asiento en la Cámara (de cinco a cuatro) y en Zamora podrían perder otro.

Los socialistas experimentarían también una caída en el voto en todas las provincias y lograrían mantener su representación actual en Ávila, Segovia, Soria y Zamora, con dos procuradores en cada una de ellas. El mayor descenso del PSCyL-PSOE en número de escaños se produciría en León, donde pasarían de los cinco actuales a tres, mientras que en Burgos y Salamanca podrían perder entre uno y dos asientos en el Parlamento. La formación de Luis Tudanca vería también como se deja un representante en Palencia y otro en Valladolid.

Los mayores beneficiados de la caída de 'populares' y socialistas serían las marcas políticas emergentes. Así, Podemos podría lograr representación en todas las provincias menos en Soria y Segovia, y competiría con PP y Ciudadanos por alcanzar un representante en Zamora. La formación morada lograría sus mejores resultados en Valladolid, donde Sigma Dos le da la posibilidad de alcanzar entre dos y tres escaños, mientras que en Burgos y León sentarían a dos procuradores en la Cámara. El grupo se completaría con sendos diputados autonómicos por Ávila, Palencia y Salamanca.

En cuanto a Ciudadanos, su mejor resultado lo tendría en Salamanca, Valladolid y León, con dos escaños cada uno; mientras que en Burgos y Segovia obtendrían uno. En Zamora disputarían la representación con el PP y Podemos. El partido de Albert Rivera se quedaría sin representación en Palencia y Soria.