Los datos de distribución de la inversión crediticia reflejan un hecho preocupante, ya que el sistema bancario autonómico continuó creciendo en su financiación a las administraciones públicas, mientras prosiguió en caída libre en su impulso a la economía real, al sistema privado.

En concreto, los créditos al sector público se dispararon un 46,4%, hasta los 5.207,38 millones de euros al finalizar el ejercicio, en relación a los contabilizados en 2013, mientras que la financiación al sector privado disminuyó un 9,7%, hasta los 47.813,6 millones de euros.

En cuanto a los depósitos, se elevaron los de las administraciones públicas un cinco por ciento, con 2.137,98 millones; frente a una bajada de los privados de un punto porcentual, hasta los 63.673,52 millones. La mayor parte de los depósitos estaban a plazo, 34.658,21 millones de euros; frente a los 18.777,54 en cuantas ahorro; y los 10.237,77 a la vista.

Las organizaciones empresariales zamoranas, comandadas por CEOE-Cepyme y por la Cámara de Comercio e Industria, han asegurado repetidas veces que las empresas no notan el retorno del crédito que anuncian desde las administraciones públicas. Más recientemente se ha sumado a esta línea de opinión la Organización de Profesionales y Autónomos, OPA, que asegura que la escasez de financiación es uno de los principales males de los trabajadores por cuenta propia.