Los hombres ganan un 18% más que las mujeres en la provincia de Zamora, según los datos de la Agencia Tributaria. Los varones tienen salarios medios de 17.116 euros anuales repartidos en 14 pagas, mientras que las mujeres registran pagas de 14.384 que se reparten a lo largo de todo el año. Llevada a la práctica, esta diferencia viene a significar que una mujer tendría que trabajar 70 días más cada año para alcanzar el sueldo medio de un hombre. Casi dos meses y medio.

Pese a todo, el dato es sensiblemente mejor que el registrado en el conjunto de Castilla y León, donde la brecha salarial supera el 25% según los datos que ha hecho públicos UGT. El porcentaje es muy similar al registrado en el conjunto de España, del 24% según los datos que maneja el sindicato. UGT asegura, con motivo del Día por la Igualdad Salarial -que se celebra mañana-, que la diferencia de salarios entre hombres y mujeres es "disparatada" y no se acerca a los niveles de la Unión Europea.

La diferencia es la más alta de los últimos siete años en Castilla y León, tendencia que "se extrapola" a la provincia. En 2008, en los meses previos a la crisis económica, la diferencia entre los salarios de hombres y mujeres era cuatro puntos inferior a la actual. "Ya eran unos datos elevados y no han dejado de aumentar" hasta registrar, según los datos de Hacienda de 2013, casi una quinta parte de los ingresos brutos de los varones.

El sindicato asegura que la comunidad autónoma "no tiene en marcha medidas políticas concretas dirigidas a la eliminación de las diferencias de retribuciones entre hombres y mujeres". Siempre haciendo referencia a Castilla y León, UGT asegura que "la suma de las desigualdades que se producen en el empleo y que se traducen en términos económicos situaron la brecha salarial en 2,4 millones de euros que dejaron de percibir las mujeres".

Todo ello, indica UGT, "al margen de lo que supondría en euros el trabajo no remunerado de las mujeres que se desempeña dentro del ámbito familiar, como cuidado de menores, de personas dependientes y tareas del hogar".

Las diferencias salariales entre uno y otro sexo son la tónica general durante toda la vida laboral. Los datos demuestran que los hombres y las mujeres tienen ya notables diferencias de ingresos desde los comienzos de sus respectivas vidas laborales. Los menores de 25 años, aunque tienen ingresos más reducidos, cuentan con porcentajes de diferencia similares al 18% del total.