Cuatro de los ocho diputados del PSOE en la Diputación de Zamora dejan el grupo y posiblemente pasarán al mixto, tras la retirada de confianza de la Ejecutiva provincial a quien hasta ahora era su portavoz, Rosa Muñoz, a la que se reprocha no haber informado de reuniones en las que estuvo presente y en las que conoció de creación de la nueva formación política Decide, liderada por el ya exdiputado socialista, José Luis Ferrero Sandín, el primero en dejar el grupo. La marcha de Muñoz arrastra, al parecer, a María Isabel Perero, alcaldesa de Villalazán; a Braulio Prieto Macías, militante socialista y alcalde de San Pedro de la Nave (Almeida); y a Leonor Calderas González, alcaldesa de San Cristóbal de Entreviñas. La marcha de los diputados "díscolos" de las filas socialistas podría confirmarse esta misma tarde, cuando está prevista la comparecencia de los cargos socialistas en la institución provincial. La crisis que se abre en el seno del PSOE en la Diputación, y que se dejará sentir en el propio partido, se inició cuando Ferrero Sandín, alcalde de Micereces de Tera, cesó para anunciar el jueves pasado la creación del nuevo partido Decide, formación a la que se unió también el alcalde socialista de Sayago Ángel Villamor, que abandó el partido en 2014; y otro exafiliado, Jesús Rodríguez Ballesteros.

"Me voy apenada por la situación creada", declaró a este diario Rosa Muñoz, cuyo cese por la dirección socialista que lidera Antonio Plaza como portavoz ha arrastrado a los tres diputados mencionados, lo que ha empañado su imagen. "Pretendía acabar con dignidad el mandato, la misma con la que he desarrollado la labor para la que me eligieron mis compañeros". La que fuera portavoz de los socialistas en la Diputación Provincial en los últimos dos mandatos lamentó la decisión de la Ejecutiva provincial, "parece que el partido, que nunca ha confiado en mí, no quiere que me vaya para casa con buena imagen", mientras subrayaba que "siempre he sido leal al PSOE y a las ideas socialistas, en las que parece que no está ahora el partido". La ya exportavoz del grupo de diputados del Partido Socialista recordó que ya había anunciado su intención de no continuar ni concurrir a las próximas elecciones, al tiempo que desmentía "haber mantenido reuniones con nadie" para perfilar la creación de Decide, como se apuntó desde esta nueva formación, ni participado en el proceso de formación. Muñoz, que no dudó en apuntar que "la relación no era buena", a preguntas de este diario sobre si la decisión si la decisión de la dirección del partido puede ser un castigo por su participación activa en Izquierda Socialista dijo que "confío en que no sea así".

Por su parte, el secretario de Organización del PSOE, Ismael Aguado, justificó la decisión de la Ejecutiva provincial en que se considera que Rosa Muñoz "ha sobrepasado la línea roja al haber estado en reuniones en las que se hablaba de la creación de un nuevo partido", como indicó el portavoz de Decide. José Luis Ferrero Sandín, "y no haber informado" de que se estaba preparando su constitución por personas, además, del propio grupo de diputados y exmilitantes socialistas, dadas las repercusiones que puede tener para el PSOE. Aguado concretó que, cuando Ferrero mencionó expresamente a Muñoz como una de las personas implicadas en ese proceso, la Ejecutiva contacto con ella para pedirle que realizara un desmentido público que dejara constancia de que nunca estuvo en ningún encuentro a tal fin ni implicada en el proceso de gestación. Muñoz reiteró ayer que "ni he estado en ninguna reunión ni he sido desleal, cuando te reúnes", precisó, "la gente habla de muchas cosas" para restar importancia a que hubiera estado presente en alguna reunión en la que se hubiera abordado el impulso del nuevo partido.