Hasta el último de sus días, Santo Tomás de Aquino estuvo permanentemente formándose. Buscó la verdad, el conocimiento. Su objetivo no era otro que ampliar lo máximo posible el horizonte del saber. Más de ocho siglos después, en Zamora, cerca de un centenar de mujeres y hombres con aspiraciones similares a las del napolitano se juntaron para honrar su nombre, su legado y celebrar el día de la formación universitaria. La Asociación de Alumnos y Exalumnos de la Universidad de la Experiencia de Zamora organizó ayer una serie de actividades para conmemorar al santo.

El presidente de la asociación, Pablo Antón, explica que el objetivo de estas celebraciones no es otro que el fomento del conocimiento a través del refuerzo de los lazos de amistad. "Lo que buscamos es tener experiencias nuevas, agradables, buscar puntos en común, debatir...", indica Antón. Ayer, casi un centenar de alumnos y exalumnos del Programa Interuniversitario de la Experiencia de Zamora se reunieron para tener una de estas jornadas que explica el presidente.

La jornada arrancó con una celebración eucarística en la iglesia de San Torcuato, en recuerdo de aquellos que algún día estuvieron en este tipo de celebraciones pero ya no pueden acudir. Desde allí, la comitiva se trasladó al restaurante Sancho II de la capital para celebrar la tradicional comida de hermandad. "Al final se trata de pasar un buen rato entre los que estamos matriculados y los que ya participaron en este programa durante otros años y fomentar lazos de unión", indica Antón.

Desde la Asociación de Alumnos y Exalumnos de la Universidad de la Experiencia reivindican la labor que realizan a lo largo del año. "Hacemos diferentes actividades culturales y educativas. Viajamos, realizamos cursos, aprendemos los unos de los otros...", explica el presidente de la asociación. De hecho, actualmente forman parte de la organización, entre alumnos actuales y anteriores, unas 250 personas. "Algunos ya tienen sus carreras universitarias que han desarrollado sus carreras en diferentes ámbitos, como la educación. Otros no las tienen y por ello deciden que ahora es el momento de resolver las inquietudes. Ese es el fin de lo que hacemos", sentencia.