El Obispado está satisfecho con la evolución del Museo Diocesano en los dos años y medio de vida que atesora la colección de la iglesia de Santo Tomé, pero el público que la visita "no es masivo" y la promoción "corresponde a las instituciones públicas". "No existe un solo hito vertical" que conduzca a los turistas al templo románico que alberga la exposición, que "tampoco a aparece en las páginas web de las instituciones", se quejó ayer el delegado diocesano de Patrimonio, José Ángel Rivera de las Heras, al hilo de la nueva muestra temporal "Art Nouveau y Art Déco: macetas, jarrones y floreros".
Al analizar en profundidad la marcha del Museo Diocesano, Rivera de las Heras manifestó la "satisfacción" del Obispado, titular y promotor de la exposición. "Las personas que acuden entienden el museo y nos escriben cartas y correos electrónicos para alabar la colección". Sin embargo, la colección que custodia el templo de Santo Tomé "puede que interese poco" a las administraciones públicas.
A ojos del Obispado, el problema reside en que las excursiones de grupos turísticos trabajan en un circuito que se repite. "Llegan a la ciudad por San Martín, vienen a ver la Catedral, regresan a la Plaza Mayor y visitan algunos templos románicos. Bajan a Balborraz a comprar algunos recuerdos y se van", expone Rivera de las Heras. El delegado de Patrimonio sostiene que "hemos hablado con las guías", aunque la situación subsiste. Para De las Heras, no es poca cosa que la iglesia de Santo Tomé albergue obras de Pedro de Mena o de Gregorio Fernández, además de la propia valía de un templo que atrae la visita ex profeso de algunos expertos.
En cuanto a la afluencia de público a los monumentos románicos -integrados en el programa de apertura del Obispado y las instituciones locales- De las Heras constató también la satisfacción de la institución eclesiástica, "aunque no me corresponde a mí decirlo". En todo caso, quienes aún no conozcan la muestra de Santo Tomé, pueden acceder de lunes a sábados -de 10 a 14.00 horas y de 17 a 20.00 horas- y los domingos y los festivos, de 10 a 14.00 horas. La entrada general cuesta 3 euros y la exposición temporal, uno. Es gratuita los lunes, de 17 a 20.00 horas y para los menores de 12 años.
