La Junta de Castilla y León deja fuera a todas las academias de Zamora que se postularon para adquirir el sello del Instituto Cervantes, ya que ninguna de ellas ha logrado la certificación. La medida supone una "discriminación" por parte de la Administración regional, según argumenta el grupo municipal de Izquierda Unida. La medida fue propuesta por el Ayuntamiento de la capital a las academias de idiomas de la capital como una "oportunidad de negocio para atraer a estudiantes que quieren aprender español y dinamizar a toda la ciudad", explicó en su momento el concejal de Juventud en la institución municipal, Víctor López de la Parte.

Sin embargo, "hay nueve academias que no han resultado subvencionadas de las que seis son de Zamora, que son todas las que solicitaron la acreditación". Mientras que la Junta ofrece una subvención que cubre el 75% de la inversión, hasta un máximo de 18.000 euros, el Ayuntamiento oferta a los interesados ayuda técnica para la preparación y redacción del proyecto. Además, la propia administración regional se encarga también de comercializar en ferias internacionales estos productos a bajo coste para los empresarios.

La subvención serviría para que las academias adaptaran sus locales para estar acreditados para las actividades del Instituto Cervantes y "se vendió como un gran negocio que podría salvar a estas empresas acosadas por la crisis y la competencia desleal", esgrime Francisco Guarido. Se trataba de ampliar los locales para que tuvieran un mínimo de 150 metros cuadrados, uno de los requisitos planteados. Los plazos acababan el 1 de agosto, pero ninguna de las seis academias de Zamora fue elegida en la resolución de la Junta.

En este sentido, la agrupación municipal en la oposición presentará en la comisión de Educación y Cultura que se celebra hoy en el Ayuntamiento una propuesta "para que se asesore y ayude desde el Ayuntamiento a estas empresas con el fin de que puedan presentar sus proyectos para la próxima convocatoria".

En julio el Ayuntamiento convocó una reunión para presentar el proyecto a 22 academias, además de las 25 representadas por la Asociación Zamorana de Academias y Profesores Particulares (AZAP), en un encuentro con buena aceptación para el proyecto. Además, junto a los responsables de los centros formativos ya instalados en la capital también se interesaron por la iniciativa personas que veían una oportunidad de negocio y barajaban abrir su propia academia de idiomas enfocada a los estudiantes extranjeros. A Zamora llegan unos 1.700 estudiantes de español al año, la mayoría franceses, frente a los 15.000 que van a Salamanca en los meses de verano con el mismo cometido.