Con la llegada de 2015 llega un cambio en los requisitos para acceder a la jubilación, algo que sucede en cumplimiento de la última reforma sobre el sistema de pensiones. Los alrededor de mil trabajadores zamoranos que cumplirán 65 años el año que viene no podrán retirarse a esa edad, como era lo habitual antes del año 2012. En cambio, tendrán que esperar hasta tener cumplidos 65 años y tres meses.

Las modificaciones vienen implementándose paulatinamente desde el año 2013, cuando los trabajadores ya no podían retirarse recién cumplidos los 65 años si querían acceder a la pensión completa. En 2013 la edad de jubilación se retrasó a los 65 años y un mes, y este año el tiempo necesario se ha incrementado en treinta días más.

Todo marcha en la dirección de situar la edad efectiva de jubilación en 67 años en el futuro. Desde 2013 y hasta 2018 la edad para retirarse y cobrar la pensión completa se irá retrasando un mes cada ejercicio hasta alcanzar los 65 años y seis meses. A partir de ahí lo hará a razón de dos meses al año hasta el ejercicio 2026, cuando serán necesarios ya 67 años para retirarse con todas las garantías de cobrar la pensión máxima que en cada caso corresponda.

El próximo uno de enero también cambiará el cómputo que se utiliza para calcular las pensiones públicas, que aumentará hasta los 18 años. Es decir, se tendrán en cuenta los salarios de los trabajadores durante los 18 años inmediatamente anteriores al acceso a la jubilación, una medida muy controvertida. En 2013 se tenían en cuenta los 16 últimos años de vida laboral. En 2022, cuando la reforma alcance su cénit en este aspecto, pasarán a computarse los 25 últimos años en los que el trabajador ha estado en activo.

Este cómputo ha despertado recelos en los sindicatos. Los sueldos de los trabajadores son más altos cuanto más cercana está su jubilación, lo que hacía que su pensión fuera más elevada. Ahora, al ser el cómputo mayor, la paga será seguramente más baja.