La nueva resintonización de la Televisión Digital Terrestre, que afectará a un buen número de las comunidades de vecinos de la provincia -y del resto del país-, obligará a los zamoranos que vivan en bloques y que quieran seguir viendo la televisión a adaptar primero sus antenas y después resintonizar los canales. Según los técnicos instaladores de telecomunicaciones la medida afectará a más de 15.000 comunidades de propietarios en la provincia y el coste promedio será de 20 ó 30 euros por vivienda.

Antonio Lorenzo, profesional del ramo, explica que serán los bloques de viviendas los más perjudicados por la nueva medida. En las viviendas individuales, en principio, el cambio de antena no sería necesario "porque ya llevan amplificador de banda", razón por la que bastaría con resintonizar los canales en la televisión. En lo referente a las comunidades de vecinos el precio dependerá en gran medida de las características de los equipos "puesto que hay comunidades que los han colocado recientemente y otras que llevan ya años con los mismos". La resintonización no ha comenzado todavía pero se espera que lo haga a partir de mediados de septiembre, momento en el cual los zamoranos que no tengan que cambiar de antena ya podrán "migrar" hacia las nuevas frecuencias.

Los instaladores esperan que el Gobierno "empiece a hacer campañas de difusión" sobre el modelo de cambios porque "ya vamos con el tiempo justo y mucha gente no se ha enterado de lo que va a pasar". El proceso debe completarse antes de fin de año, aclara Lorenzo, por lo que los instaladores esperan una "avalancha" de llamadas para adaptar los receptores al nuevo escenario. Las asociaciones de consumidores también critican que el Gobierno haya esperando hasta "el último momento" para autorizar el proceso. Además, consideran que los costes debería ser asumidos por el erario público. La partida destinada a este proceso es de más de 200 millones de euros, una cifra más reducida que la registrada en los inicios de esta maniobra, casi 800 millones de euros.

Los instaladores cifran el coste por adaptación de las antenas colectivas entre 300 y 500 euros. Según los técnicos, algunos domicilios individuales pueden enfrentarse a un problema de interferencias si se encuentran cerca de un repetidor de banda ancha de telefonía móvil. En este caso los propietarios se enfrentarían a costes que oscilarían entre los 70 y los 200 euros si quieren seguir viendo la televisión. Este asunto preocupa a los instaladores y a las agrupaciones de consumidores, que no han tardado en instar al Gobierno a que aclare las condiciones en las que los propietarios podrían reclamar.