Los partidos aprovecharon la jornada de ayer para valorar la jornada electoral. El PP hace autocrítica y dice que el PSOE "ya no es hegemónico" y los socialistas reconocen los malos resultados de los comicios.

Para el presidente del Partido Popular, Fernando Martínez Maíllo, lo que ha demostrado estas elecciones es que el PSOE "ha perdido su puesto como referente exclusivo de la izquierda, mientras que el PP mantiene su fortaleza", aunque ha reconocido que "habrá que ponerse a trabajar" para recuperar la confianza de los votantes de la capital y de Benavente, ámbitos donde el partido ha perdido puestos. Sobre el auge de otros partidos minoritarios, Martínez Maíllo lo achaca que se tratan de formaciones "que nunca han gobernado ni tenido que tomar decisiones y jamás han gestionado un euro de dinero público".

El secretario provincial del PSOE, Antonio Plaza, reconoce que las urnas han dado a su partido una "derrota sin paliativos" y que el "bipartidismo ha sufrido un varapalo tremendo". Plaza lamenta que el PSOE no haya sido capaz de aglutinar el voto de la izquierda, muy fragmentado, y descarta medidas drásticas en el seno del partido en Zamora, como la llevada a cabo por Rubalcaba por los malos resultados del domingo. Eso sí, el secretario provincial indica que el resultado del PSOE en Zamora "está por encima de la media nacional y regional".

Miguel Ángel Viñas, de IU, se muestra "muy satisfecho" con los resultados y dice que "los ciudadanos han castigado a los grandes partidos". Sobre la posible pérdida de votos en favor de Podemos asegura que "no sabríamos lo que habría pasado si no hubieran participado".

UPyD "ha triplicado" los resultados de las europeas de 2009 en Zamora, un voto que a juicio de José Miguel Mateos "viene de todos los partidos y de gente que no había votado nunca". El partido preparará ahora el salto al Ayuntamiento "con más energía" y con las perspectivas renovadas. "De repetirse los resultados tendríamos dos concejales", asegura Mateos.

Prepal ha doblado sus votos en el conjunto de España hasta superar los 8.000 -2.000 en Madrid-, aunque ha perdido 200 en Zamora. A juicio de su presidente, Francisco Iglesias Carreño, "ha sido el voto de emigrantes de León, Zamora y Salamanca" el que ha permitido a la formación mejorar sus resultados "sin contar con el impulso televisivo que han tenido otras candidaturas".