El convenio entre el Ayuntamiento y Segipsa -la sociedad pública a la que pertenece el Banco de España- para la cesión del uso del edificio de Cristo Rey será suscrito mañana, miércoles, e implicará el punto de partida para la contratación de las obras de adecuación de la futura sede que acogerá a los agentes de la Policía Municipal y el archivo. Los técnicos preparan el pliego de condiciones para licitar los trabajos con un presupuesto de 769.000 euros, según la valoración del arquitecto municipal, una cuantía que cofinanciarán ambas partes casi a la mitad, aunque será la institución municipal la que gestione la contratación de la obra y la que adelante la cuantía que Segipsa irá abonando a medida que se certifiquen las distintas fases de los trabajos.

El plazo de ejecución es de siete meses, si bien el Ayuntamiento de la capital confía en que los trabajos puedan estar concluidos a finales de año si se tiene en cuenta que el primer pago de alquiler por el arrendamiento del edificio se producirá el 1 de enero de 2015 con independencia de que los agentes de la Policía Municipal estén o no albergados en el Banco de España. El coste por el arrendamiento ya cerrado es de 90.000 euros al año que el Ayuntamiento pagará en doce abonos a la sociedad.

Las obras municipales consistirán en convertir el edificio en una infraestructura accesible ante la presencia de numerosos peldaños que se conservan de su uso como banco. En este sentido, se instalará un ascensor. Los trabajos consistirán también en la adecuación de espacios y despachos a través de mamparas así como la construcción de vestuarios y el diseño de una sala para el público de menores dimensiones que la sala de recepción actual, que es de 150 metros cuadrados. El Banco de España contará con casi una treintena de aparcamientos, 18 en el jardín y ocho más en dos garajes grandes donde con anterioridad aparcaban camiones.

La zona del archivo requerirá escasa intervención, ya que todas las estanterías y archivadoras existentes se mantendrán sin apenas obra. Por el contrario, la planta superior del edificio, con alrededor de 300 metros cuadrados, quedará sin distribuir, ya que por el momento no está previsto un destino determinado.

El Ayuntamiento podrá indicar su nombre o logotipo institucional en el edificio conforme a lo previsto en la normativa urbanística de aplicación y catalogación del Plan General de Ordenación Urbana para identificar el edificio como sede de la Policía Municipal y archivo, según el convenio. El contrato tendrá una vigencia de al menos una década prorrogable de manera automática de año en año hasta diez años más.

Los 7.500 euros al mes que el Ayuntamiento pagará por el uso del Banco de España supondrán un «ahorro» para las arcas municipales si se tiene en cuenta que la nueva sede dejará libre la actual comisaría de la Policía Municipal, donde se asentará el futuro Museo Lobo. Este traslado propiciará que el Ayuntamiento se libre de pagar los 96.000 euros por la Casa de los Gigantes, por una parte, y los alrededor de 30.000 euros por el archivo, por otro.

La infraestructura

La futura sede de la Policía Municipal en el Banco de España reservará la planta baja, más de mil metros, a acoger los puestos de policías y diferentes dependencias como 112 o atestados. La planta superior será para los vestuarios y habrá espacio también para archivos. El edificio cuenta también con una sala de reuniones de 80 metros cuadrados.

Financiación

El desuso del edificio obliga a sustituir los sistemas generales principales y a ejecutar obras para la adecuación del edificio a su nueva función. Está previsto que Segipsa desembolse 346.000 euros por las actuaciones, una cuantía similar a la que tendrá que poner sobre la mesa el Ayuntamiento.