Regresan al municipio valenciano de Aldaia donde residen con las maletas a rebosar de orgullo, satisfacción y, sobre todo, agradecimiento. Después de varios días en Zamora y de varias acciones para recaudar fondos para la pequeña Daniela, que padece el síndrome de Sanfilippo, los padres de la niña se han quedado sin palabras después de ver la involucración de toda la provincia con el caso de su hija de tres años. «Ha sido impresionante, nos hemos sentido muy acompañados por todos y no dábamos abasto ni a dar las gracias a la gente ni a recibir apoyos», explican Sergio Barrios y María Campillo, los padres de Daniela, naturales de Carbajales de Alba.

A pesar de su corta edad, la niña se ha ganado la simpatía de todos los zamoranos. Nunca le faltó un «¡Hola!» o un «¡Guapo!» a quienes se acercaban a acariciarla y «cuando caminábamos por la calle todo el mundo la conocía, ha sido increíble», apunta el padre. Están más convencidos que nunca de que los tres millones de euros necesarios para traer a España un tratamiento experimental no es una utopía. El ensayo clínico permitirá a más de setenta niños de todo el país como Daniela contar con un futuro. Aunque todavía faltan los datos definitivos, la recaudación obtenida por el hornazo en Carbajales de Alba, la marcha solidaria o la gala en los Jardines del Rey supera los 17.000 euros. Más allá de la cifra, «esto que hemos vivido en Zamora nos ha hecho revivir, sentirnos vivos», reconocen los progenitores. La entrega de Zamora a la causa les ha llenado de energía para «seguir luchando porque aunque esto no acaba aquí, sabemos que no estamos solos, que detrás hay gente que nos apoya y jamás imaginamos que todo saliera de esta manera», explica el padre, con mucha emoción al recordarlo.

Su retorno a Valencia, su vuelta la rutina, la viven con cierta «morriña» porque «nunca más vamos a volver a vivir esto». No obstante, no pierden de vista que «todo esto lo hemos organizado por la enfermedad de nuestra hija, pero nos sentimos muy bien porque cosas como las que hemos vivido en nuestra tierra son las que te hacen tirar adelante».

No pasa un día sin esperar una llamada de teléfono o cualquier tipo de contacto «de alguien con verdadera capacidad económica que nos vea» y que dé un impulso titánico a la recaudación que lleva a cabo la Fundación Sanfilippo, hasta ahora, de más de 800.000 euros.

La organización del programa de actividades en Zamora hace un reconocimiento expreso «al apoyo, esfuerzo y éxito conseguido a través de todos los eventos», apuntan en nombre de padres, familiares y amigos. «Entre todos hemos luchado y seguiremos haciéndolo contra el síndrome de Sanfilippo», plantean.

Pelear. Enfrentarse a la enfermedad. Vencerla y vivir. «Creemos que lo podemos conseguir», proclama el padre. Mientras, una palabra de oro acompaña el final de cada una de sus frases cuando habla de Zamora: «Gracias».