«La institución matrimonial es la unión de un hombre y una mujer para procrear». Así de claro lo tiene Jesús Trillo Figueroa, abogado, hermano del famoso político popular, Federico Trillo, que ayer inauguraba el Mes de la Salud de la Fundación Científica Caja Rural, con el ciclo dedicado a la Semana de la Familia organizada en colaboración con la Delegación Diocesana de Familia y Defensa de la Vida.

Trillo cree que el matrimonio entre personas del mismo sexo «es una realidad que no puede darse por razones biológicas», aunque se mostró de acuerdo en haber regulado con otro tipo de institución los derechos de las parejas homosexuales. El abogado considera que el España se ha producido una «revolución jurídica silenciosa» desde la llegada de Zapatero al poder y su primera ley contra la violencia de género, que ha sido, dijo «ineficaz». «Es necesario arbitrar una solución a la violencia de género o si quiere doméstica, pero no como se hace en esa ley que parte del síndrome de mujer maltratada y que considera que el hombre es prácticamente una consecuencia del machismo criminal. De tal forma que esa ley tiene una serie de prejuicios ideológicos que hacen que su eficacia haya sido escasa y como se ve no ha solucionado el problema. Y además ha hecho una discriminación que ha servido para que se utilizase en muchas ocasiones como un instrumento, si quiere, de ventaja respecto de situaciones matrimoniales rotas».