«Este Gobierno caótico nos deja una situación crítica y el reto de crear empleo» «Hemos hecho ajustes donde gobernamos, no recortes»

-Concurre por segunda vez al Congreso, aunque había quien daba por hecho que se jubilaría.

-Jubilarme no porque estoy con ilusión y muchas ganas, y muy bien de salud. Con lo cual siempre que mi partido me proponga y los ciudadanos lo deseen, yo encantado de continuar. Tengo la ilusión del primer día.

-¿Será incómodo llevar a un cunero, a Víctor Calvo-Sotelo, al lado?

-No. Víctor es una persona entrañable, un gran talento y además tiene experiencia. Le conozco, es bondadoso y generoso, y está deseoso de comenzar la campaña en Zamora. Está comprometido con el PP, con la política y con Zamora. Fue subsecretario de Fomento cuando se consiguió que el AVE pasara por Zamora y no por León, cuando yo era alcalde.

-¿Dejará entonces más poso que Gustavo de Arístuegui?

-Bueno, yo a Arístegui le conozco y es una persona también entrañable para mí y de gran valía. Tengo una gran relación con Gustavo y es un hombre también de talento.

-Estamos en una etapa de cambio, con esta gran crisis que obliga a reflexionar y buscar otros caminos. ¿Esta circunstancia añade atractivo a ser diputado?

-Sin duda. El gobierno caótico de los últimos años deja a España y a los españoles en una situación crítica. Estamos ante un momento difícil que afrontamos con ilusión y esperanza, en el que el PP, como lo hizo en las dos legislaturas del Gobierno de José María Aznar, aporta una propuesta de recuperación económica, fundamental para ganarse la confianza de inversores, de los propios empresarios y de los extranjeros, con el objetivo de generar empleo, que es el dramático problema que tiene España. Esta tarea es emocionante.

-La crisis está golpeando duro no sólo en España, sino en toda Europa, ¿qué barita mágica sacará Rajoy para invertir la situación?

-Rajoy ya lo ha dicho, no hay ninguna barita mágica, para activar la economía española hace falta sensatez y mucho sentido común, austeridad, ideas muy claras, un programa muy claro de Gobierno y de política económica que no hemos tenido, hoy se decía una cosa y al mes siguiente la contraria. Esa claridad, la tiene Rajoy y la experiencia, él formó parte de aquel Gobierno de Aznar, quizás no fuera una situación tan crítica porque no existía la crisis financiera, pero la recesión española ha sido propiciada por un gobierno inexistente en los últimos meses y de fracaso en la política económica durante siete años.

-Los socialistas les acusan a ustedes de provocar esta situación económica por la burbuja inmobiliaria que infló Aznar y que ha estallado inevitablemente hace tres años.

-Le voy a dar dos datos: Los dos primeros años de Gobierno de Zapatero fueron los de mayor actividad en la construcción en España; y en los ocho años del Gobierno Aznar de cada diez empleos creados, quince millones en total, dos eran en el sector de la construcción, el resto eran de industria, comercio, servicios y otras actividades. No se puede imputar a aquel Gobierno el inflar la burbuja inmobiliaria.

-Dice que Rajoy tiene un programa claro para crear empleo, un programa que desde el PSOE, lo decía el viernes José Blanco en Zamora, se afirma que se esconde para ocultar los recortes sociales.

-Es una desfachatez que José Blanco acuse de recortes al PP. Es su estilo, el del PSOE, y durante esta campaña repetirán el mensaje del miedo a «que viene la derecha con recortes». En los ocho años de Zapatero se han producido los mayores recortes en política social de la historia democráctica española, el mayor es generar cinco millones de parados. Esa es nuestra mayor preocupación y la mejor política social que se puede hacer, generar empleo, que los españoles con su esfuerzo puedan vivir dignamente.

-El PSOE argumenta esa acusación subrrs de recortes en educación en la autonomía de Madrid o la política de Dolores de Cospedal en Castilla-La Mancha.

-No son recortes. En la jornada laboral de los profesores se les cambia la actividad docente por actividades complementarias, el tiempo para corregir y preparar exámenes, etcétera, pero no se incrementa su actividad a cambio del mismo salario, eso sería un recorte. Hablamos de algo que está enmarcado en la Ley. Los recortes son los que ha hecho el PSOE que han reducido los salarios a funcionarios en un 5% y congelado las pensiones, ¿cómo pueden hablar de los recortes de la derecha?

-La sociedad civil cree que es hora de suprimir privilegios a la clase política -Cataluña acaba de eliminar una paga extra- y de dejar de echar mano al bolsillo de los contribuyentes, que bastante apaleados están ya con la crisis.

-Sin duda. Rajoy ya ha dicho en estos últimos cuatro años que hay que reducir los gastos de la Administración, adelgazar la Administración. La austeridad es fundamental, no se puede gastar más de lo que se tiene porque se genera déficit y eso aumenta la deuda; y se ha hecho lo contrario. Rajoy en estos últimos cuatro años ha llegado a proponer retirar subvenciones a los partidos políticos, a los sindicatos y los empresarios, ir reduciendo. Hay que proteger la sanidad, la educación, los servicios sociales. Del resto hay que recortar de donde sea. Rajoy ha propuesto reducir incluso el número de miembros de las cámaras. Si los nos dan la mayoría, lo haremos por la vía de la austeridad.

-¿Demostrarán que los políticos también se sacrifican en tiempos de crisis?

-Sin duda, somos los primeros que tenemos que dar ejemplo, pero tengo que decir, por otro lado, que hablamos mucho de privilegios y no son tantos como se dicen. A veces se sobredimensiona la situación de los políticos y se hace demagogia con que estamos muy bien pagados, que tenemos un salario fijo. Somos eventuales y tenemos un salario digno, pero no lo que a veces se dice por quien desea contaminar y hacer demagogia.

-El ciudadano tiene la impresión de que en estos años de bonanza económica ha sido atracado por las entidades financieras mientras los políticos se llenaban los bolsillos.

-La banca juega un papel financiero, de intermediación de recursos económicos, de disponer de liquidez para quien lo demanda para generar actividad económica y financiar al empresario. Eso es algo que tenemos que exigir y posiblemente haya que realizar una modificación legislativa del sistema bancario en profundidad.

Zamora, 1944

En 1995 dejó la dirección regional de Caja Duero para entrar de lleno en la arena política, como candidato sorpresa del PP a la Alcaldía de Zamora. De gran desconocido entre los votantes pasó a regidor municipal con una mayoría absoluta de quince concejales, insólita en la historia del Ayuntamiento capitalino. Instalado en la Casa de las Panaderas contra todo pronóstico, consiguió repetir en dos ocasiones más, también con mayorías, aunque menos holgadas. En las elecciones generales de 2004 apareció en la lista del PP al Senado, escaño que compaginó con su cargo como regidor. En los comicios municipales de 2007 rehusó ser cabeza de cartel a la Alcaldía y un año después aparecería en la lista al Congreso de los Diputados. En esta cita electora es le número uno a la Cámara Baja.