Es teatro, pero también es un musical. La escenografía brilla por su ausencia, pero tampoco hace falta. La época de los juglares vuelve al presente, pero contando historias del pasado.

La compañía chilena Tryo Teatro Banda ha llegado a Zamora, su segunda patria, y prometen no dejan indiferente a nadie. «Pedro Valdivia, la gesta inconclusa» es el título de la obra con la que el grupo teatral cierra su gira en España, «esta será la última actuación antes de que volvamos a Chile a comenzar con otro espectáculo, y hemos elegido Zamora porque aquí tenemos nuestra segunda casa cuando venimos a España, nuestro centro de operaciones, y queremos hacer como una fiesta final para los amigos que tenemos aquí y todos los aficionados al teatro que quieran acudir a ver la obra», explica el director de la compañía, Francisco Sánchez.

El teatro del servicio territorial de Cultura de la Junta, en la calle Santiago Alba Bonifaz, se convertirá el próximo sábado día 11, a las ocho de la tarde, en todo un espectáculo histórico sobre la conquista de Chile por el español Pedro de Valdivia, allá por el año 1629.

Las peripecias que el extremeño vivió con el también español Pedro de Almagro para conquistar a los mapuches chilenos, es la base de está obra que tiene como hilo conductor las cartas que Valdivia envió en esos momentos al rey Carlos V. «La historia surgió porque un buen día me topé con esas misivas en las que el colonizador le contaba a su rey el proceso de la conquista, y lo vi como un tesoro para conocer nuestra propia historia», declara el director.

Con la música como aspecto preponderante, pero sin perder de vista la teatralidad, suena de pronto un bandoneón, tambores, cornetas , trutrucas, pifilcas, mandolinas, un acordeón o un trombón. Más de 20 instrumentos de todo el mundo forman parte de este espectáculo donde «destacan los sonidos indígenas por la propia inercia de la obra», señala el actor Pablo Obreque, que interpreta él mismo al personaje nativo de la obra.

Con Carolina González como productora, Marcelo Padilla en la iluminación, Alfredo Becerra como actor y músico, junto a Francisco y Pablo, la banda busca con su espectáculo despertar el interés de los ciudadanos por la cultura histórica. «Nos dimos cuenta de que hacían falta más obras que hablaran de nuestra identidad, de nuestra realidad, porque el teatro cumple también un rol de investigación y antropológico», explican los integrantes de la compañía.

La música en vivo pone el contrapunto en una historia en la que actúa como protagonista «¿porqué los músicos tienen que estar a parte? Se nos ocurrió que por qué los actores no podían tocar los instrumentos, y así pusimos en marcha esta obra», comentan. Y el público avala la elección.

La compañía no va a cobrar entrada por asistir al espectáculo, «a la salida quién quiera podrá colaborar con la voluntad, sobre todo para pagar al equipo de montaje», explican.

Una buena oportunidad para viajar sin subir a un avión y vivir aventuras sin moverse de la capital.