La crisis que atraviesa el sector de la construcción comienza a pasar factura a las plantillas de trabajadores empleadas por las empresas, que recurren a la reducción de personal para afrontar el descenso de la edificación de viviendas. El recorte de las plantillas ha llegado en algunos casos al 50%, según reconoce el presidente de la Asociación Zamorana de Empresarios de Construcción (Azecop), Emiliano Alonso, quien precisa que las empresas que han tomado estas medidas son fundamentalmente las dedicadas a la construcción de las estructuras de las viviendas. También detalla que «las constructoras que están reduciendo personal son las que han terminado las obras que tenían en marcha y no empiezan otras nuevas». Esta circunstancia obliga a los empresarios a prescindir de parte de sus trabajadores, a los que o bien no se renueva el contrato o a los que no se realizan contratos nuevos al no requerir personal de apoyo por el descenso de actividad del sector.
Los despidos se han agudizado en las últimas semanas, según apuntan los sindicatos mayoritarios de la provincia, que han registrado un aumento de las consultas por parte de trabajadores que se han quedado en paro o que lo prevén. «Durante la última semana hemos recibido cerca de 40 consultas, cuando hay semanas en las que apenas viene gente», señala el responsable de Construcción de UGT, Andrés Mielgo. El tipo de información que solicitan se centra en los trámites establecidos para la obtención del finiquito y sobre posibles retribuciones pendientes de cobro, como vacaciones no disfrutadas.
Aún así los sindicatos aseguran que el aumento del desempleo en el sector todavía no es alarmante y sigue manteniendo un elevado volumen de trabajadores, cerca de 7.000 en la provincia. Algo que constatan los datos del Instituto Nacional de Empleo de los últimos meses, que reflejan un incremento del paro de carácter moderado. Así, durante el pasado mes de junio la cifra de trabajadores de los andamios que se quedaron sin empleo permanecía constante respecto al mes anterior y se situaba en 1.557 personas, aunque respecto al mismo mes del año pasado supuso un aumento de 43 personas. Fue en mayo cuando se registró el mayor incremento de obreros inscritos en las oficinas del INEM en comparación con 2007, con una subida de 361 desempleados.
El responsable de Construcción de CCOO, Enrique Vicente, revela el perfil de los trabajadores que tienen más posibilidades de quedarse en la calle. «Primero se suele despedir a los trabajadores que llevan menos tiempo frente a los veteranos, cuyos despidos salen más caros». Sin embargo, Vicente también asegura que un alto porcentaje de los empleados de este sector disponen de contratos indefinidos, como consecuencia de la nueva normativa al respecto implantada en el año 2006 y de las buenas perspectivas del sector existentes en aquellas fechas. «Ahora las empresas se encuentran con el problema de que no saben hacer con los trabajadores a los que hizo fijos y van buscando apaños para mantener la plantilla», según indica.
Los trabajadores que se quedan sin empleo optan por desplazarse a otras provincias colindantes en busca de obras nuevas o dan el salto de la edificación privada a la obra pública, que mantiene un buen ritmo de actividad pese a la crisis.
Los empresarios vaticinan que el desempleo se agudizará los próximos meses
El presidente de la Asociación Zamorana de Empresarios de Construcción (Azecop), Emiliano Alonso, cree que la crisis de la construcción producirá un aumento del desempleo que se agudizará en los próximos meses. «Por cada vivienda que no se construya se perderá una media de dos empleos», según vaticina. Una previsión que se suma a otra no menos negativa, ya que se espera que la crisis pueda dejar en la calle a cerca de 800.000 trabajadores en el conjunto del país.
En todo caso, el presidente de Azecop no pierde el optimismo y considera que los malos indicadores actuales responden a la falta de tiempo para que los planes de choque previstos por las distintas administraciones comiencen a dar sus frutos. «Ahora se ha producido un descenso de la licitación de obras pero va a salir mucha obra pública nueva que se encuentra anunciada», según indica. Además, recalca que los efectos de la crisis de la construcción se han dejado notar en menor medida en la provincia y en la región que en el resto de España, sobre todo en grandes ciudades donde la desaceleración del ritmo de la edificación de viviendas ha sido mayor.
El responsable de Azecop también asegura que desde comienzos de año algunas empresas del sector han registrado una ligera recuperación, sobre todo las de pequeño tamaño, que tras experimentar un considerable descenso de actividad durante los últimos meses ahora han mejorado sus resultados, según sostiene.
