Durante tres años han practicado con las jornadas de Alimentos de Zamora en La Rioja y ahora les ha llegado el turno de devolver la visita. Tres profesores y 14 alumnos de la Escuela de Hostelería de Santo Domingo de la Calzada se han encargado de elaborar más de 600 degustaciones de una creación que por primera vez se presenta al público en esta feria, y que está confeccionada exclusivamente con productos de la tierra. Se trata, explica su artífice, el profesor del centro David Sotés, de un rollo de lechal castellano con crema de queso zamorano, setas de primavera, crujiente de garbanzo de Fuentesaúco y glacé de vino de Toro. «Todos son alimentos de Zamora con los que se pueden hacer muchos platos y elaborar menús completos, porque son todos de altísima calidad y hay una amplia variedad de productos», asegura.

Uno de los responsables de la colaboración que existe entre la Diputación de Zamora (sobre todo en el área de Promoción Industrial y en relación a Alimentos de Zamora) y la Escuela de Hostelería de La Rioja en Santo Domingo de la Calzada es Francisco Ferreras, zamorano, y que es profesor de inglés del centro de enseñanza, y también un gran aficionado a la gastronomía. «Tenemos que ser conscientes de la gran calidad y variedad de alimentos que tenemos en esta provincia», mantiene. De momento los representantes de la escuela riojana ya han contactado con la Escuela de Hostelería de Zamora para abrir líneas de colaboración. «Nuestra idea es que puedan venir a La Rioja y organizar allí algunas jornadas gastronómicas», adelanta Francisco Ferreras.

Cientos de personas hicieron ayer cola, pacientes, para degustar la propuesta culinaria de los alumnos y profesores de La Rioja. Lourdes Sánchez, otra de las docentes, destaca la riqueza, tanto formativa como cultural que tiene esta visita para los estudiantes. Impresionada, entre otras cosas, por la «calidad de las harinas zamoranas, que es primordial», Sánchez confirma la continuidad de las jornadas formativas con la Diputación en una cuarta edición que se celebrará los días 19, 20 y 21 de mayo de nuevo en Santo Domingo, con los cerca de 150 alumnos de la escuela.

Uno de los estudiantes, Sergio Herrero, destaca lo «positivo» del viaje a Zamora. «Ya conocíamos que tenía muchos productos de calidad y hemos aprendido bastante visitando queserías y Gaza», detalla. «Si tengo que destacar un alimento que tenga especial interés para mí sería el queso». Y es que, como recuerda el profesor David Sotés, «un alumno se forma no sólo para trabajar en La Rioja, sino para trabajar en cualquier parte, y es importante que conozca los productos con más calidad que existen en el país y con los que probablemente va a trabajar al elaborar sus propuestas culinarias».

Base de queso

Sobre una rebanada de pan tostado al horno se coloca una capa de crema de queso zamorano que previamente se ha convertido en flan y se ha batido.

Rollo de lechal

El siguiente paso es colocar sobre esta base una fina loncha de lechazo de Castilla y León relleno de mollejas, que se rocía con un glacé de vino de Toro.

Setas de primavera

A continuación se colocan las setas de temporada para permitir una perfecta combinación y mezcla de sabores con productos autóctonos de la provincia.

Crujiente de garbanzo

La elaboración concluye con un crujiente de garbanzo de Fuentesaúco que da el toque final a esta exquisita composición elaborada especialmente para Alimenza.