El juez decretó la libertad sin fianza para tres integrantes de una familia acusados de intento de homicidio contra su cuñada, a la que supuestamente causaron heridas en el abdomen con un arma blanca en su domicilio de Alcañices, según informó en su día la Guardia Civil. Los procesados tienen obligación de comparecer los días uno y quince de cada mes en el juzgado y están sujetos a una orden de alejamiento que les impide acercarse a menos de 300 metros de su cuñada o comunicarse con ella. En el auto de excarcelación el magistrado no menciona el delito de homicidio y alude únicamente al de lesiones, lo que justificaría que haya decidido dejarles en libertad sin que hayan tenido que abonar ninguna cantidad y tras las graves acusaciones que pesaban sobre ellos inicialmente. En la decisión judicial parece haber sido decisivo el hecho de que la víctima no haya realizado el seguimiento médico que se le exigió para controlar por parte de los forenses la evolución de las heridas que sufrió el 15 de octubre.

Los acusados negaron haber tenido nada que ver en el suceso en el que se hirió con un objeto punzante a la mujer, cuyas iniciales son C.H.F., para lo que contaban con el testimonio de sus amigos, que aseguraron que la noche en que tuvo lugar la agresión estaban todos juntos en la capital zamorana, en establecimientos hosteleros en los que pasaron la tarde y cenaron. Afirmaron haber estado todos juntos hasta las dos de la madrugada, mientras que una de las procesadas, cuyas iniciales son P.M.P., que había abandonado la prisión en verano, continuó con sus amigos de marcha hasta las cuatro de la madrugada. Su cuñado, A.M.P., también tenía antecedentes penales, así como la herida. Los acusados, dos hermanas y el marido de una de ellas, fueron recluidos en la macroprisión de Topas tres días después del suceso. La agresión tuvo lugar en el interior del domicilio que ocupaba C.H.P en Alcañices junto a su suegro y padre de las dos acusadas y de su marido, que se había quitado la vida en Zamora hacía casi un mes. Una llamada a la Guardia Civil alertó del altercado familiar.