La Diputación de Zamora y la Cámara Municipal de Braganza han dado los primeros pasos para forjar una alianza con la que buscan captar fondos europeos a través de proyectos conjuntos. Las dos instituciones han mantenido ya los primeros contactos para implementar una estrategia común “transversal y con atención a varias áreas”, según confirmó el presidente zamorano, Francisco José Requejo. La idea es aprovechar los nexos que comparten ambos territorios para sacar rédito en un contexto clave para acceder a la financiación comunitaria.
El propio mandatario liberal indicó que esos avances iniciales se han plasmado con reuniones técnicas en las que han participado representantes del nuevo área de la Diputación dedicada a los fondos europeos y sus interlocutores procedentes de Braganza. El primer contacto tuvo lugar el pasado 28 de junio y sirvió para realizar “un abordaje” sobre lo que va a ser el desarrollo de los proyectos y para analizar los instrumentos que mejor se ajustan a esas ideas.
Otro encuentro este mes
En principio, la intención de ambas partes es mantener un nuevo encuentro antes de que concluya el mes de julio. Requejo subrayó que, en esa segunda reunión, ya se pondrán sobre la mesa propuestas concretas y se tratarán algunos objetivos más definidos. En definitiva, se trata de “avanzar” desde el convencimiento de que la suma de fuerzas puede favorecer a dos territorios con muchas afinidades.
No en vano, el propio Requejo advirtió de que Europa está haciendo “una apuesta” por impulsar a los territorios despoblados y envejecidos, una cuestión que se combina con la fuerza que pueden hacer proyectos en los que participan instituciones de dos países en base a las conexiones de frontera que las unen.
El presidente de la Diputación justificó el carácter técnico de las primeras tomas de contacto desde la perspectiva de la operatividad en la búsqueda de los proyectos que mejor pueden encajar con la búsqueda de financiación. Una vez los expertos determinen con qué propuestas se puede llegar mejor a los objetivos, los políticos se sumarán al debate e intervendrán para perfilar los detalles de este acuerdo bilateral.
Transferencia de proyectos
Por el momento, como único ejemplo concreto de lo que se pretende con esta alianza, Requejo citó la transferencia de proyectos como el de monitorización de las personas mayores en sus hogares, una iniciativa de la que Zamora ya tiene referencias a través de sus planes piloto y que encaja en la estrategia “silver economy”, que pasa por ser una de las líneas de trabajo prioritarias de la Diputación Provincial en este mandato.
Precisamente, en lo concerniente a la “silver”, la institución zamorana ya ha mantenido contactos con Braganza y con otras instituciones municipales de Portugal en los últimos meses para tratar de lanzar proyectos de colaboración. De hecho, Requejo se implicó personalmente en esta cuestión durante su visita al país vecino a finales de febrero, en la que mantuvo una reunión con la entonces secretaria de Estado de Valorización del Interior del Gobierno luso, Isabel Ferreira, que ahora ejerce como responsable de Desarrollo Regional.
En aquella cita, ambas partes acordaron la apertura de una “cooperación real” para lanzar un proyecto piloto ligado a la “silver” cuyos detalles aún se desconocen. Lo que sí se percibió fue la voluntad de Zamora y la región fronteriza de Portugal para “potenciar las dinámicas de cooperación territorial y favorecer la repoblación” en unas zonas muy castigadas por la emigración a lugares más desarrollados de sus respectivos países.
Todo apunta a que esa inquietud por colaborar se plasmará ahora a través del acuerdo entre la Diputación y la Cámara Municipal de Braganza, que tratarán de establecer una línea de trabajo conjunto que dé pie a futuras colaboraciones. El primer paso, el del convencimiento mutuo, ya está dado. Ahora, falta concretar los planes.
