Han corrido ríos de tinta sobre las posibles soluciones a la galopante despoblación en Zamora con propuestas futuribles que en muchas ocasiones no han llegado a buen puerto o se han quedado en papel mojado. Pero no es el caso de la Universidad de Salamanca y la empresa Latem Aluminium, con sede en el polígono industrial La Marina de Villabrázaro. Ambas entidades firmaron a principios del presente año un convenio para fomentar la creación de empleo, la investigación y la transferencia tecnológica en Zamora. Un acuerdo que ya han trasladado de la teoría a la práctica con el objetivo firme de retener talento, fijar población y frenar el reto demográfico.
El convenio contempla la creación de un programa de becas para vincular las prácticas, tesis doctorales, trabajos de fin de grado y de máster del alumnado de la USAL a la actividad de la compañía, especializada en economía circular gracias a la reutilización del aluminio procedente de la chatarra. ¿El objetivo? La contratación de becarios y recién titulados por parte de la empresa, afincada también en la localidad leonesa Villadangos del Páramo. En este sentido, cabe recordar que la compañía cuenta en la actualidad con instalaciones de refinería, laminación y acabados, a las que proyecta añadir otras nuevas orientadas a la valorización, retornos, producción de envases y generación de energía fotovoltaica.
Asimismo, el pacto también abordaba la puesta en marcha de nuevas líneas de investigación orientadas a la mejora de los procesos en el ciclo de aluminio, nuevos usos del aluminio secundario, optimización de procesos tecnológicos, desarrollo de componentes software aplicados al proceso industrial y el desarrollo de programas de transferencia de tecnología, sobre todo a través del alumnado de la Escuela Politécnica Superior del Campus Viriato de Zamora.
“Los estudios de ingeniería, que tienen una demanda social menor que la empresarial, ofrecen posibilidades como las que abre este convenio”, destacaba en su presentación Ricardo Rivero, rector de la USAL. Por su parte, Macario Fernández, consejero delegado de Latem Aluminium, hacía hincapié en “la creciente demanda a nivel mundial de aluminio verde para sectores tan importantes como la automoción, la energía y la construcción”.
Un factor, el del potencial laboral, que ambas entidades enfatizan para dar la opción de quedarse en su tierra a aquellos jóvenes que quieran hacerlo y desterrar el mantra del exilio forzado por falta de oportunidades. En palabras de Ricardo Rivero, el objetivo es “generar empleo de calidad que permita a los jóvenes desarrollar su carrera laboral sin tener que marcharse”.
