“Como ingenieros, no os pido que participéis en el futuro, sino que creéis uno nuevo y mejor”. Esa responsabilidad fue esta mañana la que se les demandó a los alumnos de la Escuela Politécnica Superior de Zamora, durante el acto de graduación, para el que habían tenido que esperar un año.
Son los alumnos de la promoción 2017-2021 de los grados de Ingeniería Informática en Sistemas de Información, Ingeniería Mecánica, Ingeniería de Materiales y doble grado de estas dos últimas. La treintena de estudiantes entraba en parejas al salón de actos del Campus Viriato entre los aplausos de familiares y amigos, tan emocionados como ellos.
La que fuera directora de la Escuela —ahora subdirectora de Docencia, Grado y Posgrado— durante la época universitaria de los protagonistas del día, Yolanda Gutiérrez, dio la bienvenida a todos los presentes. “Sentíos orgullosos del talento demostrado”, alentó a los alumnos, de quienes destacó la capacidad de adaptación que habían desarrollado “desde aquel 14 de marzo de 2020, donde todos tuvimos que aprender a vivir de otra manera, con cambios para los profesores en su forma de impartir clase como para los alumnos en su forma de estudiar”, recordó. “Fue tiempo de superar adversidades y obstáculos, pero hoy es un día de felicitaciones para todos, comenzando por vuestras familias, con su apoyo, los profesores, por el interés y conocimiento que os han transmitido, pero, sobre todo, a vosotros, porque habéis demostrado que gracias a vuestro estudio, dedicación, talento y esfuerzo, habéis llegado hasta aquí”, aplaudió.
En la mesa presidencial también estaban los padrinos de las distintas ingenierías de esta promoción, quienes también tomaron la palabra. Jesús Ángel Román, padrino de los ingenieros informáticos, además de recordarles su misión de cambiar el futuro, destacó que el haber estudiado en la Universidad de Salamanca “no solo aporta conocimiento, sino unos valores”.
Natividad Antón se dirigió a los compañeros de Materiales para apoyar a Román en ese deseo de que sea esta nueva generación de ingenieros “los que cambien el mundo a través de todos los conocimientos adquiridos”.
La madrina de la promoción de Ingeniería Mecánica, Leticia Aguado, agradeció su paso por la escuela “que nos ha enriquecido también a los profesores. Llevaos todas las vivencias, tanto las buenas como las malas, pero sobre todo el gran mérito de haber crecido como buenas personas”, subrayó, destacando la compresión y empatía que tuvieron con el campus durante los peores meses de la pandemia, con todos los cambios que se produjeron en las aulas para adaptarse a esa nueva realidad.
Tras la imposición de becas por parte de los padrinos y representantes de los colegios profesionales, los alumnos también quisieron dirigirse a sus ya antiguos profesores y lo hicieron a través de dos representantes, quienes agradecieron al profesorado “el conocimiento, la actitud, pero también los dolores de cabeza y, sobre todo, el coraje que nos habéis transmitido” y reconocieron que, “el trabajo y el esfuerzo no se negocian” y por eso habían llegado hasta aquí.
El acto finalizó con todos en pie para cantar “Gaudeamus igitur”, el himno universitario por excelencia, final al que se sumó la tuna. Tras este colofón, los estudiantes continuaron con la celebración, ya fuera de las instalaciones universitarias, para conmemorar el final de una etapa y el inicio de su andadura profesional.
