La Virgen de la Peregrina permanecerá expuesta al público todas las tardes de los viernes del mes de junio en la iglesia de San Antolín para que todos los zamoranos y hermanos de la Cofradía de la Virgen de la Concha podrán admirar el resultado de recuperación de esta talla de 1884, la última de las realizadas por el imaginero zamorano Ramón Álvarez que se encuentra bajo custodia de alguna cofradía.

Los ciudadanos podrán comprobar el cambio de la escultura gracias al trabajo llevado a cabo por la restauradora Patricia Ganado y por el director del taller de tallas diocesano, Bernardo Medina Garduño. Este es el primer paso para que La Virgen de la Peregrina se incorpore a las actividades que organice la hermandad, explicó el presidente de la misma Ricardo Flecha esta mañana.

Detalle de la restauración de la policromía en el rostro de la talla Sergio Villar

En cuanto a la restauración de la escultura de bulto que se sospecha que pudo ser encargada para sustituir a la Virgen de la Concha más ajustada a los gustos de la época del siglo XIX, idea que se descartaría finalmente la Cofradía, dato del que no existe documentación, Ganado y Medina describieron el delicado trabajo de liberar el bastidor de sacos de arena adosados con cables de cobre para dar forma a la talla bajo el vestido, así como el meticuloso trabajo llevado a cabo por la restauradora para recuperar el pelo y una de las manos, en la que porta la vara, la que estaba más deteriorada.

El siguiente objetivo será volver a pintar San Antolín e intentar abrirlo para "que no ser pierda el culto a la Virgen de la Concha en el barrio de La Lana, a pesar de ser consciente de que es muy difícil, abundó Flecha, que confirmó que a La Peregrina permanecerá a la vista de los feligreses y "que está previsto realizar el culto con esta imagen el día de Santiago Apóstol, ya que la Cofradía de la Concha es también de Santiago", vinculación que data del siglo XIV y que como representa la concha que porta la patrona de Zamora.

Por el momento, ni se descarta ni se puede confirmar que la talla procesionará como hacía antiguamente por calles zamoranas, en todo caso "ya lo haría en su tamaño y altura original, tal y como la concibió el imaginero zamorano". Los trabajos han incluido la rehabilitación de parte de la indumentaria que tenía la escultura: dos vestidos que están en fase de restauración, y el que lleva colocado en tono rojo y remates dorados, concretó Flecha.

La imagen, con gran similitud iconográfica con la Concha, fue creada con una cuidada policromía en la cabeza, en sus manos y en los delicados pies que calzan sandalias, únicas partes que quedan a la vista bajo la indumentaria. Esta advocación de la Virgen Peregrina, vinculada al Camino de Santiago, a Pontevedra, a Sahagún, a Leiva y su iconografía, representa a la virgen con hábito de peregrino, bordón y calabazas y que lleva desde su finalización en 1884, fecha desde la que se encuentra en la iglesia de San Antolín.