El coronavirus ha caído como una bomba en la estructura empresarial de la provincia de Zamora, ya muy debilitada antes de la aparición de la pandemia por un consumo interno que se mantiene en cifras de subsistencia desde hace años. El Instituto Nacional de Estadística, a través de una serie experimental de datos, pone ahora cifras al varapalo económico que el COVID ha supuesto en Zamora e indica que, si se toma como última referencia la cifra de sociedades existente a 1 de octubre del año pasado, han cerrado en la provincia 675 empresas durante la pandemia. Teniendo en cuenta que el ejercicio 2020 comenzó con 3.984 empresas con trabajadores contratados en la provincia, la epidemia se ha llevado por delante casi el 17% del tejido empresarial zamorano. Unas cifras dramáticas.

Los datos indican además que el impacto no ha sido homogéneo en el entramado empresarial. Han sido las sociedades más pequeñas, las que contaban con una cifra inferior a los cinco trabajadores, las que más han sufrido en los últimos meses. Casi el veinte por ciento de las empresas con menos de cinco empleados han desaparecido durante el año 2020. Una de cada cinco. De 3.251, Zamora ha pasado a tener 2.634, siempre según el INE. 

En el resto de sociedades el impacto ha sido más reducido. El 93% de las sociedades con entre 6 y nueve trabajadores han asumido, de momento, el golpe de la pandemia y continúan con su actividad —no indica el INE si lo hacen de forma plena o reducida, con parte de la plantilla en ERTE; pero existir, aún existen—. El 98,14% de las empresas con entre diez y 99 trabajadores en nómina han aguantado el “tirón” de los últimos meses —solo se han perdido siete empresas de estas características—. Por lo demás, las diez empresas que tienen más de 100 empleados siguen en activo, igual que las que cuentan con más de 250 personas en nómina. 

La terraza de un bar, ayer recogida por la lluvia. José Luis Fernández

Los datos de España

Los datos nacionales son similares y muestran que la pequeña y mediana empresa, la que sustenta en buena medida el tejido económico del país, sale muy debilitada de la crisis. En el conjunto de España han cerrado más del veinte por ciento de las empresas con menos de cinco trabajadores mientras que el cese de actividad de las de más de cien personas supera por poco el uno por ciento. Cifras tan diferentes como la noche y el día. 

Por lo demás, el INE analiza también cuál ha sido la evolución del tejido empresarial por sectores de actividad, datos muy útiles para conocer el impacto de la pandemia en las diversas empresas zamoranas. Los datos muestran que, en términos absolutos, la hostelería es el sector más perjudicado por el avance de los contagios. Nada sorprendente, pues desde el propio sector llevan meses lanzando datos que van en la misma dirección. Cerca del 22% de los negocios dedicados a la venta de comidas y bebidas —bares y restaurantes, para entenderse— han bajado la persiana definitivamente. De nuevo, la estadística no tiene en cuenta que muchos están en ERTE. De los 610 empresarios de la hostelería que tenían a personal contratado —no se cuentan los datos de autónomos dedicados a la hostelería— sobreviven 477. Los datos del cierre del año, que no se incluyen en la estadística, prometen ser igual de malos por las restricciones ahora vigentes. 

Hay, con todo, otros sectores que presentan unos datos porcentuales peores que los de la hostelería. Así, el 23% de las empresas dedicadas a la educación —academias, por ejemplo— han cesado su actividad en los últimos meses. Han hecho lo propio el treinta por ciento de las sociedades que se ganaban la vida con los espectáculos y casi la mitad de las que se dedicaban a tareas de entretenimiento, según el INE. 

Los números

  • La hostelería. En números absolutos, el sector más golpeado por la crisis. Las restricciones y el hecho de que poner coto a la vida social se haya convertido en empeño de las administraciones han acabado con muchos negocios. Más del veinte por ciento han echado el cierre de forma definitiva. Muchos más aguantan en ERTE.
  • Comercio. Reducciones de aforo, miedo al contagio y, sobre todo, la contracción del gasto han hecho mella en el comercio zamorano. Cerca del trece por ciento de las empresas del sector no han podido soportar el primer año de la pandemia y han bajado la persiana de forma definitiva.
  • Construcción. Las cifras que presenta el sector de la construcción tampoco invitan precisamente al optimismo. Zamora cuenta en estos momentos con 227 empresas del gremio, lo que representa una caída de casi el 25% desde el mes de enero de 2020.

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