Un total de 759 controles de la Guardia Civil se despliegan desde ayer y durante los próximos cuatro días para vigilar la circulación por las carreteras de Castilla y León con motivo del puente de la Constitución, en cumplimiento de las medidas COVID-19 y para garantizar el respeto a los cierres perimetrales, según ha informado la Delegación del Gobierno en la Comunidad. El número de dispositivos totales, 759, se reparten a lo largo de cinco días, desde la medianoche de la pasada madrugada hasta la medianoche del martes día 8 de diciembre. Así, un total de 148 se encuentran ya vigilando vías principales y secundarias durante la jornada de hoy, otros 148 mañana, sábado, 149 el domingo, 169 el día 7, lunes, y 145 el martes. El número de efectivos totales desplegados alcanzará a lo largo del puente los 5.500, suma de los agentes de las comandancias y los del Sector de Tráfico de la Guardia Civil, que dependen de la DGT.

En la provincia de Zamora, los principales controles se establecerán en las comunicaciones con Valladolid, Portugal y Galicia. La Guardia Civil estará especialmente presente en la A-52, la N-525 y la N-122, aunque los controles se realizarán tanto en carreteras de alta capacidad como secundarias. El dispositivo especial tiene como objetivo garantizar la observancia de los cierres perimetrales determinados por la autoridad sanitaria en la comunidad entre las diferentes áreas establecidas por la normativa de la Junta y asegurar que no se producen desplazamientos tanto fuera de la comunidad como entre las distintas áreas dentro de ella, más allá de los de quienes puedan justificar algunos de los motivos exceptuados por estas normas.

Pese a que los controles se realizarán tanto en carreteras de alta capacidad como secundarias, las principales vías sobre las que se reforzará la vigilancia, en previsión de una mayor afluencia de tráfico, son en León la AP-66, N-VI, N-621, CL-626; en Palencia, la A-67, N-611 y CL-627; en Salamanca, la A-66, N-630 y CL-525; en Segovia, la A-1, AP-6, N-VI y CL-601; en Soria, la A-15 y las N-110, 111, 122, 234; en Zamora, la A-52, N-122 y N-525; en Burgos, la N-120, N-232 y AP-1, y en Ávila la N-501, N-502 y CL-501 y CL-505 a nivel regional.

La Delegación del Gobierno en Castilla y León ha recordado que la recomendación es quedarse en casa y que están prohibidos los desplazamientos injustificados entre las distintas áreas provinciales definidas por la autoridad sanitaria, al encontrarse en diferentes situaciones de restricción. Cabe recordar que tan solo las provincias de Segovia, Ávila, Salamanca y León han accedido al denominado nivel tres, mientras que el resto de la comunidad se encuentra en nivel cuatro de alerta. Esto quiere decir que sí están permitidos los desplazamientos entre provincias que se encuentren al mismo nivel, pero en ningún caso se puede viajar en territorios que estén en niveles diferentes. Por ejemplo, no se puede ir de Zamora a Salamanca, aunque sí de Salamanca a León. Estas limitaciones de entrada y salida del perímetro tendrán su excepción en aquellos desplazamientos debidamente justificados como son la asistencia a centros, servicios y establecimientos sanitarios; cumplimiento de obligaciones laborales, profesionales, empresariales, institucionales o legales; asistencia a centros universitarios, docentes y educativos, incluidas las escuelas de educación infantil; retorno al lugar de residencia habitual o familiar; asistencia y cuidado a mayores y personas dependientes, entre otras cuestiones.