El coronavirus sigue incrementando su presencia en Zamora. Sanidad comunicó este domingo 11 nuevos brotes en la provincia, que se unen a los 22 que ya estaban activos. En total, 33 focos que afectan a 415 personas y cuya procedencia es variopinta, aunque los últimos tienen que ver con los positivos detectados en los colegios, unos contagios que ya han obligado a cerrar varias aulas en distintos puntos de la capital y de las comarcas.

El regreso de los alumnos a las clases ha complicado una situación ya de por sí delicada, y es que la tendencia es preocupante desde finales del mes de agosto. Ahora, el incremento de los contagios ha llegado hasta el punto de que, solo en los últimos siete días, la Junta de Castilla y León ha comunicado 418 casos nuevos en Zamora; más de la mitad de ellos, entre el viernes y el domingo. Precisamente, el parte de ayer confirmó otros 51 contagios.

Así las cosas, Sanidad ya ha certificado 2.313 casos en la provincia desde que el coronavirus hizo su aparición pública allá por el mes de marzo. En este periodo, la enfermedad se ha cobrado la vida de 110 personas en el Complejo Asistencial de Zamora, la última ayer mismo. La buena noticia es que 440 ingresados han recibido el alta a lo largo de estos seis meses; los dos últimos recuperados se confirmaron también este domingo.

En cuanto a la situación del Complejo Asistencial, la pandemia sigue elevando la presión sobre los sanitarios. Según el último parte de la Junta de Castilla y León, la cifra de hospitalizados en planta pasó de 41 a 44 en apenas 24 horas, mientras que la Unidad de Cuidados Intensivos se mantuvo con cuatro pacientes.

Es cierto que la ocupación sigue muy por debajo de la registrada en el mes de abril, cuando el número de ingresos triplicaba al actual, pero basta con viajar hasta el primer día de septiembre para ver cómo está evolucionando desde entonces la cifra de hospitalizaciones en la provincia.

El día 1 de este mes, hace apenas tres semanas, el Complejo Asistencial de Zamora tenía 18 pacientes ingresados por COVID, dos de ellos en la UCI, según los datos de la Consejería de Sanidad. Así pues, en estos veinte días, la cifra de ingresados se ha disparado, en consonancia con un aumento de los casos que augura un arranque de otoño complejo en la provincia.

LA PROVINCIA SUPERA LOS MIL CASOS ACTIVOS, SEGÚN LOS DATOS DE LA HISTORIA CLÍNICA DE LOS PACIENTES

La Consejería de Sanidad también ofrece datos sobre los casos activos que hay en cada zona básica de salud, unas cifras que se extraen de la historia clínica de los pacientes, y donde se contabiliza a las personas que se consideran “aún enfermas”. Según esta información oficial de la Junta de Castilla y León, el número de casos activos en Zamora se eleva ya por encima de los mil, tras el incremento registrado en las últimas semanas.

En concreto, la cifra acumulada entre todas las zonas básicas de salud de la provincia alcanza los 1.136 afectados actualmente por el virus, con la capital a la cabeza del número de enfermos. En concreto, la ciudad registra 400 casos activos, repartidos entre los 152 del Virgen de la Concha, los 94 de Puerta Nueva, los 87 de Parada del Molino y los 67 del Santa Elena.

En cuanto al resto de la provincia, la situación varía en función de cada zona, aunque lógicamente se recrudece en los puntos donde se han detectado brotes en las últimas semanas. Así ocurre en Sanabria (187) o Campos-Lampreana (102).

En lo referente a los grandes núcleos, más allá de Zamora capital, Sanidad sitúa en 127 el número de casos activos en Benavente, mientras que Toro se maneja en cifras más bajas, con apenas 29, según los datos derivados de la historia clínica de los pacientes.

Por lo demás, Zamora Norte y Zamora Sur, las zonas a las que pertenecen los pueblos más cercanos a la capital, cuentan con 41 y 53 casos activos respectivamente; Sayago tiene 47; Vidriales, 37; Aliste y Tera, 24; Corrales, 17; Alta Sanabria, 15; La Carballeda, 13; La Guareña, 12; y Villalpando, 10.

Además, las zonas con menos casos activos de Zamora son Carbajales y Tábara, con cuatro cada una, a la espera de ver cómo evoluciona una pandemia que sigue manteniendo en jaque a la provincia en este arranque de curso, tras un verano en el que la cifra de contagios había permanecido estancada durante muchas semanas.