Media docena de niños y niñas concluían hoy su aproximación a la arquitectura, no solo la del antiguo convento de San Francisco de Zamora, sede de la Fundación Rei Afonso Henriques (FRAH), donde participaron en un taller Actividades Portuguesas, sino la de la propia naturaleza, explica Alberto Alonso, integrante de la empresa Mini2AC junto a la educadora infantil Ana Alfonso. A la actividad organizada por la Diputación Provincial, en colaboración con la FRAH, han acudido 50 niños, en turnos de quince días, en los que han convivido y “aprendido que todo lo que les rodea son construcciones, no solo sus casas”, agrega Alonso.

El objetivo se ha cumplido: divulgar la arquitectura en sus diferentes estilos y utilidades, y enseñar el portugués con una profesora lusa. Se trata de una primera edición que tendrá continuidad el verano próximo, aunque se espera que como estaba programado: un campamento de intercambio hispano-portugués dirigido a niños y niñas en edad escolar, explicó el diputado del área de Cultura, Deportes y Turismo, Jesús María Prada Saavedra. La pandemia transformó el proyecto para compartir tradiciones, cultura e idioma, agrega Prada, “hubo que reformularlo para convertirlo en un taller dirigido solo a niños zamoranos en el que han aprendido arquitectura y portugués”. La implicación de la Cámara Municipal de Braganza estaba asegurada para llevar a cabo esa actividad que incluía un taller de portugués, cuyo aprendizaje no se ha dejado de lado.

Dos participantes explican el significado de sus creaciones. J. L. F

Alberto Alonso y Ana Alfonso organizaron diversas actividades para concienciar a niños y niñas del necesario respecto a la arquitectura y al entorno natural, explica el diputado provincial. Aunque no fue posible cumplir con ese hermanamiento que se había programado, Prada espera que el año próximo haya una continuidad de la edición que permita “intercambiar tradiciones, costumbres y lengua”, eje principal para los participantes zamoranos, para “que se familiaricen con el idioma portugués que tanto desconocemos en Zamora, a pesar de la proximidad” con el país vecino, “el conocimiento del portugués en Zamora es muy escaso”, subrayó

El taller concluyó con una amplia explicación de los participantes a sus padres sobre las recreaciones y reinterpretaciones que habían realizado de monumentos como la torre Eiffel o las pirámides de Egipto; de construcciones como los palomares zamoranos o las casas de flor japonesas. Como colofón, recibieron encantados de manos de Prada los diplomas por su participación en la actividad de la Diputación.