La historia de Asier de la Iglesia es una historia de superación. Jugador de baloncesto, descubrió con 29 años que padecía esclerosis múltiple, una enfermedad por la que fue rechazado en algunos equipos. Pero lejos de tirar la toalla, decidió seguir jugando con inmejorable resultado: debutó en ACB, la máxima categoría del baloncesto español, y actualmente es uno de los jugadores mejor valorados de Liga EBA.