Con motivo de la conmemoración del Día Internacional de los Archivos, Toro ha puesto en valor el patrimonio documental que se conserva y almacena en el Arco del Postigo, con una visita guiada en la que este viernes han participadovecinos interesados en descubrir el funcionamiento del servicio o los legajos que protege en el histórico edificio.
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La directora de la Casa Municipal de Cultura, Cristina Tamames, ha dirigido el recorrido guiado durante el que ha destacado la importancia de custodiar y salvaguardar el patrimonio documental relacionado con la actividad municipal, que también forma parte de la historia de la ciudad.
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Recordó Tamames que en 1761 un incendio calcinó el Ayuntamiento y los documentos que custodiaba en su interior por lo que en el Archivo Municipal se conservan los posteriores a ese año, excepto un libro de pago de impuestos de 1505 que los participantes en la visita guiada pudieron admirar de cerca y en el que apreciaron las huellas del fuego.
En este punto, matizó que otros documentos relacionados con la historia de la ciudadse conservan gracias a los archivos de las parroquias, legajos que se localizan en el Archivo Diocesano, mientras que otros vinculados al pasado de Toro y su época de mayor esplendor se localizan en el Archivo de la Real Chancillería de Valladolido en el ubicado en Simancas.
Por otra parte, Tamames reconoció que en los últimos cinco añosse “ha avanzado mucho” en el Archivo Municipal que, sobre todo, es consultado por investigadores, aficionados a la historia y por ciudadanos que precisan, por ejemplo, buscar licencias municipales de años pasados o por personas que requieren documentos necesarios para “temas de herencias”, de ahí la importancia de la custodia y salvaguarda de documentos relacionados con la gestión del Ayuntamiento de Toro.
Durante la visita, la directora de la Casa Municipal de Cultura también ofreció a los participantes una detallada explicación sobre el edificio del Arco del Postigo, que pertenece al segundo recinto amurallado de la ciudad y que cumplió la función de “puerta” de defensa.
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Con el paso del tiempo, el edificio albergó una carnicería, la Casa del Pueblo del PSOE o viviendas, hasta que en la década de los 80 fue adquirido por el Ayuntamiento de Toro y, tras su rehabilitación, trasladó a sus dependencias el departamento de Obras y Urbanismo que, posteriormente, fue ubicado en el palacio de Condes de Requena.
Desde 1990 el histórico edificio alberga el Archivo Municipal que se “custodia” desde la Casa Municipal de Cultura y las diferentes concejalías y en el que se protegen más de 2.200 libros y cerca de 1.800 cajas con documentos generados por la actividad y gestión del Ayuntamiento de Toro.