La Opinión de Zamora

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Sonoridades con huella toresana

El joven organista Javier Alonso Lorenzo destaca como músico invitado en el último concierto de la madrileña Orquesta Euroamericana

Presentación al público de Javier Alonso Lorenzo como representante de los músicos toresanos. | J. M. A.

La Orquesta Euroamericana, procedente de Madrid, ha presentado a una de las jóvenes promesas toresanas de la música con motivo de su último concierto, que se celebró en Santa Marta de Tera ante un público entregado que abarrotó la iglesia.

El jovencísimo Javier Alonso Lorenzo fue el artista invitado de la cita, un toresano de 16 años que demostró su destreza al órgano, uno de los tres instrumentos que toca y del que reivindica su valor e importancia. Y es que la formación musical de Javier empezó cuando él solo contaba con ocho años y que ha continuado hasta hoy: actualmente se encuentra cursando quinto curso de profesional en la especialidad de trompeta en el conservatorio, estudios que compagina con el piano y por supuesto, el órgano, además del instituto.

Un instrumento “que conecta con el pasado”, y en el que el joven empezó a formarse bajo la dirección del profesor Vicente Urones y la asociación “amigos del órgano”, junto con los que Javier ha estudiado este instrumento que él describe como “la base de la música actual” y del que asegura que es algo “digno de lo que enamorarse”.

Toro se convierte en la ciudad del órgano gracias a un nutrido grupo de alumnos

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Ya son varios los conciertos a las espaldas de Javier, intérprete de varios instrumentos acostumbrado a enfrentarse al público. Como organista, ha podido disfrutar la suerte de tocar en el colegio Amor de Dios de Toro, donde se imparten las clases en un órgano electrónico. Además, también se le han abierto las puertas del monasterio del Sancti Spiritus, también San José, y San Torcuato, todos ellos con órganos antiguos reservados solo para los profesionales.

Y es que Javier ha sido el representante de los jóvenes músicos de Toro, que poco a poco, se está convirtiendo en una ciudad de estudio del órgano gracias a un nutrido grupo de alumnos en el primer año de las aulas para su aprendizaje.

Un talento que ha detectado la Orquesta Euroamericana, que Javier detalla “no es una orquesta sinfónica, sino de cámara, destinada a tocar en sitios cerrados y pequeños”, explica sobre las raíces de esta agrupación que llega desde Madrid y que le ha brindado su primera experiencia “profesional” como organista, un encuentro de primer nivel junto a otros músicos especializados, entre los que esta vez, Toro ha dejado su huella sonora.

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