“Qué vergüenza, más de 3 años con estos baches y nadie hace nada. Solo nos quieren para que les votemos y para pagar impuestos”.

Así decía un cartel aparecido en una señal en la carretera CL-602, a la salida del puente de hierro, en protesta por el mal estado del firme del tramo de carretera que une el citado puente con el barrio del Canto. El cartel desapareció cuatro horas después.

En los últimos años el firme se ha ido deteriorando, con baches cada vez más grandes que dificultan la circulación por este tramo de una longitud aproximada de 1.000 metros.

Algunos de los agujeros de mayor profundidad han sido rellenados por los propios usuarios de trozos de ladrillo, zahorra o cantos, pero muchos vecinos de la zona del Canto reclaman una solución definitiva con una nueva capa de rodadura.

La situación del asfalto es tan mala que el Ayuntamiento se ha llegado a plantear incluso el corte provisional de la carretera.

El problema está en que varias administraciones se disputan la titularidad de la vía, es decir, quién es el dueño de la carretera y quién debe arreglarla. Por el momento, no parece claro cuál es la Administración responsable, pero los ciudadanos reclaman soluciones.

Ya en 2016 el Ayuntamiento de Toro era consciente de la necesidad de arreglar esta carretera y comenzó una investigación para dilucidar la titularidad de la vía. Se planteó una consulta a la Unidad de Carreteras de Zamora, que se dirigió al Catastro emitiendo una certificación catastral en la que se especificaba que el titular de la vía es el antiguo Ministerio de Obras Públicas, en la actualidad Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que a fecha de hoy dirige Raquel Sánchez Jiménez.

En consecuencia, el Ayuntamiento de Toro se dirigió a la Subdelegación del Gobierno, que en febrero de 2018 respondía que la vía no es competencia de la Unidad de Carreteras “con independencia de lo que reflejan los datos catastrales aportados” y, un mes después, la gerencia territorial del Catastro comunicó la baja de la vía como titular del Ministerio, tramitada por la Unidad de Carreteras.

Ante esta situación, el Ayuntamiento solicitó una nueva certificación catastral en la que todavía seguía figurando como titular el Ministerio y, de forma paralela, el alcalde emitió una providencia para que los servicios técnicos municipales elaboraran un informe, con el fin de determinar la titularidad de la carretera. El informe no pudo esclarecer la titularidad de la carretera, pero sí que la vía era un camino de tierra hasta los años 80.

En septiembre de 2021, el Ayuntamiento de Toro solicitó de nuevo al Catastro la lista de todos los titulares de esta vía a lo largo del tiempo. Por motivos legales, el Ayuntamiento no puede destinar dinero municipal a una carretera que no es suya, por lo que hay que esperar a dilucidar la titularidad de la CL-602 entre el puente de hierro y el barrio del Canto.