El monasterio de Santa Sofía de Toro ha conmemorado el 900 aniversario de la orden premonstratense, fundada en 1121 por San Norberto, con una eucaristía presidida en su iglesia por el obispo de Zamora, Fernando Valera y concelabrada por el obispo emérito de León, el toresano Julián López, y varios sacerdotes.

Decenas de toresanos arroparon a las hermanas en una efeméride tan especial y participaron en la eucaristía oficiada en la iglesia del convento aunque, ante la limitación de aforo, otros vecinos tuvieron que seguir la ceremonia religiosa en uno de los patios del histórico edificio.

En la homilía, Valera repasó la vida y obra de San Norberto que, como precisó, desde muy joven “abrazó la vida religiosa”, aunque su conversión se produjo tras sufrir una caída de su caballo.

El incidente provocó que San Norberto perdiera el conocimiento y cuando lo recobró sus primeras palabras fueron las pronunciadas por San Pablo en el camino a Damasco, ¡Señor! ¿Qué quieres que yo haga?, pregunta que fue respondida por una voz interior que le instó a apartarse del mal y a hacer el bien.

Las religiosas del convento toresano dan la bienvenida a los asistentes a la eucaristía M. J. C.

El obispo de Zamora también recordó que San Norberto fue ordenado sacerdote en 1115 y uno de sus propósitos fue "cumplir fielmente el Evangelio".

Tras ser nombrado arzobispo se retiró al valle de Prémonté en el que fundó la orden premonstratense, aunque las reformas que promovió generaron una fuerte oposición. San Norberto falleció a los 53 años, aunque su llama sigue muy viva en las comunidades religiosas de su orden.

Durante la homilía de la eucaristía, Valera también reconoció que "hacen falta" religiosas contemplativas como las que habitan el convento de Santa Sofía, religiosas que "sepan leer en la noche los signos de los tiempos" e invitó a los asistentes a la efeméride a "descubrir a Cristo desde los itinerarios" que desde el monasterio toresano "se abren a la humanidad".

En la eucaristía, el obispo también recordó que la efeméride rememorada por el convento de Santa Sofía de Toro coincide este año con el IX centenario de la restauración de la diócesis de Zamora.