El PP ha achacado los problemas que presenta la piscina climatizada a que permanece cerrada a los usuarios desde mayo del 2015 y ha exigido al alcalde de Toro, Tomás del Bien, que reabra el recinto porque, de lo contrario, "los daños van a ser irreversibles". El PP ha mostrado su "sorpresa" por la valoración realizada por el alcalde sobre el deterioro de la piscina, en la que recientemente se han detectado importantes goteras, y recordó que existe un informe técnico emitido en marzo de 2015 en el que, tanto la dirección de obra como la empresa que ejecutó las obras, certificaban que "estaba en óptimas condiciones".

Sobre este informe, los concejales de la oposición precisaron que fue redactado después de la inspección realizada el recinto, al haberse cumplido cinco años desde su apertura. Dos meses más tarde, como recordaron, se cerró al público la piscina y "desde ese momento empieza el deterioro de las instalaciones", ya que si pudieran ser utilizadas por los usuarios sería necesario llevar a cabo los preceptivos trabajos de mantenimiento. Además, subrayaron que a una instalación como la piscina cubierta de Toro, "moderna, de última generación y que ha sido objeto de premios internacionales de construcción, lo peor que le puede ocurrir es que continúe cerrada por el capricho del alcalde". Para el PP, la "responsabilidad" del deterioro de la piscina es del alcalde y del equipo de Gobierno que, además, "están privando a los ciudadanos de disfrutar de una instalación de ocio, deporte y salud". Por último, la oposición criticó los actos vandálicos de los que ha sido objeto la piscina climatizada.