Cerca de 300 corredores participaron en la tarde del pasado domingo en la tercera edición de la San Silvestre toresana que, una vez más, aúno el deporte con la diversión. Organizada por la concejalía de Deportes del Ayuntamiento, en colaboración con el club Trail Run Sport Toro y la empresa Zamorun, esta carrera popular concitó el interés de numerosos aficionados al deporte, algunos de los cuales participaron ataviados con disfraces. Con salida y meta en el Arco de Corredera, los participantes completaron dos vueltas de 2.350 metros y, una vez concluida la carrera, fueron entregados los premios a los más rápidos de cada categoría y a los mejor disfrazados. Los más pequeños disputaron una carrera especial de chupetines.