Ni la lluvia ha conseguido deslucir una de las fiestas más arraigadas en el corazón de los toresanos y con la que, año tras año, demuestran su hospitalidad y generosidad con todos aquellos turistas que se desplazan a Toro para disfrutar de la Fiesta de la Vendimia. Este sentido homenaje a los hombres del campo, a las bodegas y a todos aquellos que, con su esfuerzo y trabajo, hacen posible que la ciudad pueda presumir de un vino de extraordinaria calidad, fue clausurado ayer con una jornada marcada por la lluvia y que condicionó la decisión del Ayuntamiento de Toro de suspender el espectáculo de danza programado para cerrar la celebración.

Así, muchos tuvieron que conformarse con los recuerdos de cinco días inolvidables y, sobre todo, con las imágenes del tradicional desfile de carros engalanados a la antigua usanza que el pasado domingo congregó a miles de personas en las calles y plazas de la ciudad, del concierto ofrecido, en la Plaza Mayor, por el grupo de folk "Abrojo" o de la II edición del festival de flamenco ofrecido por Tito Vacillo, Carrasco y Miguel Escudero, acompañados al toque por Miguel "El Churre".

El puente festivo contribuyó ayer a que numerosas personas decidieran visitar Toro para recorrer los diferentes puestos de venta del mercado medieval que, durante los últimos días, ha ocupado calles y plazas. Muchos se quedaron con las ganas de cerrar las fiestas con el esperado espectáculo de baile que tenía previsto ofrecer la nueva escuela municipal "Palacio de la danza" y que, finalmente, fue suspendido. Para muchos toresanos, la última edición de la Fiesta de la Vendimia, ha sido una de las mejores de los últimos años, sobre todo, por la gran cantidad de turistas que, durante las cinco jornadas festivas, han recalado en Toro para descubrir su casco histórico, sus monumentos y, sobre todo, el vino que elaboran las bodegas de la zona, eso sí, maridado con sabrosas y contundentes viandas. En un primer balance de esta celebración, el concejal de Festejos del Ayuntamiento de Toro, Juan Antonio Rodríguez, realizó una valoración positiva porque, a falta de que se cierren las estadísticas oficiales del número de visitantes, "parece que ha habido más gente que otros años".

Del mismo modo, el concejal de Fiestas resaltó que, este año, la ampliación del mercado medieval a otras zonas de la ciudad como la plaza de San Francisco, en la que fueron instaladas las "tascas", ha propiciado que los visitantes pudieran "repartirse", evitando así las masivas aglomeraciones de gente que, en otras ediciones festivas, se han registrado en la Plaza Mayor, especialmente, después del desfile de carros engalanados.

Por otra parte, Rodríguez reconoció que la lluvia "ha deslucido" algunos actos previstos para esta celebración, como el certamen nacional de folclore "Ciudad de Toro" que, el sábado, tuvo que reducir el tiempo establecido para la actuación de cada uno de los cuatro grupos de baile participantes. Asimismo, ante la previsión de que las lluvias reaparecieran, el Ayuntamiento de Toro decidió suspender ayer el espectáculo de danza programado.

El concejal de Festejos también se refirió a la masiva afluencia de visitantes que, de forma especial, recalaron en la ciudad el pasado domingo y que llegó incluso a afectar a la red de telefonía móvil que, durante varias horas, estuvo colapsada. Por último, Rodríguez remarcó que la Fiesta de la Vendimia, que cuenta con la declaración de Interés Turístico Regional, "crece cada año", sobre todo porque "tiene una base muy buena" y su repercusión "es positiva para diferentes sectores como la hostelería, el comercio o el turismo". De hecho, la ocupación hotelera durante el puente festivo ha rozado el 100% en la ciudad y en pueblos limítrofes. También, en estos días de fiesta, han sido numerosas las excursiones organizadas para descubrir Toro y participar en una de las fiestas que, con el paso del tiempo, se ha consolidado como una de las más importantes de la ciudad y, sobre todo, más entrañables para los toresanos.