Enfermedad

Habla la madre que evitó la eutanasia de su hija en Galicia: "Si viera que está sufriendo la aprobaría"

Belén, de 54 años y enferma de esclerosis múltiple, solicitó este martes a Sanidad posponer indefinidamente el procedimiento

La mujer ha tomado la decisión semanas después de que su madre no abriese la puerta a los sanitarios que fueron a buscarla a su casa el pasado día 2 de noviembre para practicarle la eutanasia

Habla la madre de Santiago que evitó la eutanasia de su hija: "Si viera que está sufriendo la aprobaría".

Habla la madre de Santiago que evitó la eutanasia de su hija: "Si viera que está sufriendo la aprobaría". / ARCHIVO

David Suárez

Giro de 180 grados en el caso de la mujer de Santiago que pidió una eutanasia, cuya madre intentó impedir con una denuncia en el Juzgado. Belén, de 54 años y enferma de esclerosis múltiple, presentó este martes un acta notarial a la Conselleria de Sanidade para posponer indefinidamente el procedimiento. La Fundación Española de Abogados Cristianos, a la que acudió la madre de Belén en busca de asesoramiento para detener la eutanasia de su hija, celebraba hoy en un comunicado que esta ha solicitado “mediante un acta notarial” aplazar indefinidamente la eutanasia que le había sido concedida.

Ahora, su madre -Carmen-, pone en duda los protocolos para este tipo de casos tras el cambio de opinión de su hija. "Las personas que aprobaron esta eutanasia no tienen conciencia porque en los informes médicos pusieron varias mentiras para que se pudiera aprobar. Mi hija está aquí, a mi lado, y puede confirmarlo", declara a El Correo Gallego (medio perteneciente al mismo grupo editor de FARO, Prensa Ibérica). Carmen se refiere a unos informes que definió ya a principios de noviembre como "exagerados" y "falseados".

La mujer también arremete contra el Servizo Galego de Saúde (Sergas) por no haber realizado un estudio del estado mental de su hija, a la que diagnosticaron esclerosis múltiple cuando era joven, antes de aprobar el protocolo de la eutanasia. Carmen insiste en que una grave depresión fue lo que llevó a Belén a solicitar la eutanasia y recuerda la tarde del 2 de noviembre, cuando unos sanitarios acudieron a su casa para recoger a su hija y trasladarla al Hospital Clínico de Santiago, pero ella -aconsejada por Abogados Cristianos- impidió que entrarán en el domicilio. "(Los sanitarios) vinieron a recoger a mi hija como si fuese un animal que se lleva al matadero, esa es la sensibilidad de nuestro Gobierno... ahora no está deprimida, está consciente, feliz y agradecida de que yo no abriera la puerta a los que venían a buscarla, está perfectamente... Nadie la ha obligado a hacer lo que ha hecho ante notario", asegura.

Belén fue quien solicitó el procedimiento, una petición que la comisión del Sergas que la evaluó sostuvo, ya que, entre otras cuestiones, la mujer "padece dolores insoportables". Desde Abogados Cristianos sostienen que "el informe autoriza la eutanasia porque la hija sufre dolores constantes e insoportables, cuando no toma ni tan siquiera analgésicos", un hecho que la Ley de Eutanasia no considera indispensable para concederla. Dicha Ley contempla que uno de los requisitos es padecer una enfermedad grave o incurable -como es el caso de este mujer- o que genere padecimiento grave. Asimismo, no exige el padecimiento grave para eutanasiar y lo señala únicamente como una posibilidad.

Carmen asegura que únicamente quiere lo mejor para su hija. "¿Usted cree que si yo viera que mi hija está sufriendo no lo aprobaría? Belén ha firmado las últimas voluntades ante notario y especifica claramente que si algún día depende de algún medicamento o de alguna máquina para seguir viviendo será el momento en que todo se acabe... Pero por ahora no hemos llegado a eso", explica a este diario. "Todo empezó el año pasado, cuando Belén se contagió de Covid, que le afectó mucho porque no estaba vacunada. Fue al médico de cabecera y este, en vez de decirle que necesitaba recuperarse o que necesitaba tratamiento psicológico, hizo un informe con cinco mentiras y adelante...", sostiene Carmen, refiriéndose a una primera valoración médica que derivó tiempo después en el inicio del expediente sobre la eutanasia.

El acta notarial clave en el caso, que firma Belén y en el que solicita la suspensión indefinida del protocolo aprobado para eutanasiarla, fue entregada por su madre este martes en el CHUS para que figure en el expediente de su hija. "Me mandaron llevarlo al hospital y tengo el justificante de que lo entregué, sellado y con el membrete de la Xunta".

Ahora, el Sergas, que recibió a mediados de noviembre la notificación del Juzgado de Santiago que archivaba la denuncia que interpuso Abogados Cristianos y que reanudaba el procedimiento de eutanasia, deberá pronunciarse.