Tangana en el Parlamento Vasco. Un motivo más de vergüenza. Un motivo más para la reflexión de los gobernantes españoles. En Vasconia al igual que en Catalonia, el virus del odio está metido en las entrañas de los que odian España, de los que nada quieren con los españoles, como si ellos fueran de otra nacionalidad. Torra nos llama 'bichos' y 'cosas' y los Bilduetarras, amigos de Otegi, de Ortuzar, de Urkullu, de Pablo Iglesias, de Puigdemont y de Torra van más allá. Quieren manchar la imagen de la Guardia Civil y la Policía Nacional y se emplean a fondo con los peores insultos, con las mayores infamias.

El doble rasero de esa gentuza que para más inri ocupa escaño en el Parlamento español no sorprende a nadie. Así y todo no estamos acostumbrados a tanta infamia. El parlamentario vasco, una hiena, Julen Arzuaga, ha calificado a los miembros de las Fuerzas de Seguridad de "franquistas", "asquerosos", "nazis" y "lobby infecto, para que no se reconozca a las víctimas que ellos mismos han generado". Con todo lo que ETA hizo contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, con las masacres que ocasionó, cómo puede hablar así este individuo. Si los vascos de ocho apellidos, los de la pasta, han vivido toda su puta vida como marqueses de los de antes ya que para trabajar contaban con los leoneses, los extremeños, los gallegos, y en fin, todos los del resto de España que son los que han ayudado a levantar con el sudor de su frente las comunidades del odio: Euskadi y Cataluña.

Los Bilduetarras, al igual que los de PdCAT, Cup y todo ese batiburrillo de siglas que se agrupan en torno a los nacionalismos excluyentes y a los separatismos, tienen para Policía y Guardia Civil, los mismos calificativos que para Ciudadanos, Vox y Partido Popular. Llamarlos "franquistas" y "fachas" es su insulto favorito. Sólo que ahora agregan lo de "nazis" cuando los verdaderos nazis son ellos. Ellos y sus jóvenes hienas hacen lo mismito que hacían las SS, la Gestapo y las juventudes hitlerianas, con 'pogromos' incluidos. En eso son verdaderos expertos. Y si no a Alsasua le remito, aunque Alsasua pertenezca a la Comunidad Foral de Navarra.

Y mientras estos y otros episodios se convierten en algo cotidiano en los Parlamentos vasco y catalán, Pedro Sánchez sigue firmando concesiones y dando carta de naturaleza a lo que ya nos ha avanzado Miquel Iceta. Tanto PNV como PdCAT, anhelan que Policía Nacional y Guardia Civil, salgan para siempre de sus comunidades. Pobrecitos vascos y pobrecitos catalanes. Los que no son como ellos acabarán dejándolos solos porque están haciendo irrespirable el clima en contra de los que llaman españolistas. Las teles callan cobarde o interesadamente los testimonios de tantos 'perseguidos' por el nacionalismo excluyente y el independentismo.

Mientras ellos abominan de nuestros Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, los españoles, salvo deshonrosas excepciones, cada día apoyamos y queremos más a esos hombres y mujeres, en su mayoría jóvenes, que visten deforma vocacional unos uniformes que respeto profundamente, como respetan profundamente la mayoría de españoles. Sin ellos, la convivencia no sería posible o tendría demasiados episodios de violencia.

El pasado año, la Junta Pro Semana Santa concedió el Barandales de Honor a la Guardia Civil que recibió la más sonora y prolongada de las ovaciones. Este año el Barandales de Honor es para la Policía Nacional. A buen seguro, también recibirá el reconocimiento de los zamoranos a través de una sonora y prolongada ovación. Y ¡Viva la Guardia Civil y la Policía Nacional!