Ana Obregón continúa en el punto de mira después de que la web 'Informalia' revelase que no ha aportado a la Fundación Aless Lequio hasta el momento -como se comprometió públicamente a hacer- ni el importe de las exclusivas que ha concedido tras el nacimiento de su nieta Ana Sandra, ni los derechos de autor obtenidos con la venta del libro 'El chico de las musarañas'.

Después de aclarar que la editorial ingresará los beneficios obtenidos por la obra cuando finalice el año fiscal (en marzo) y de reconocer que finalmente no donará todo lo que ha ganado en las diferentes entrevistas que ha concedido porque ahora tiene una boca más que alimentar, y ha dejado de trabajar para volcarse en el ciudado de la pequeña Anita, Ana ha estallado en redes sociales contra los que dudan de la fundación que lleva el nombre de su hijo y ha asegurado que nada hay de cierto en las informaciones que cuestionan el funcionamiento de la entidad.

Y ahora es Alessandro Lequio el que por fin se ha pronunciado sobre esta polémica y, aunque no ha dudado en dar la cara por la fundación y defender su labor y sus cuentas públicamente, se ha desmarcado de la presentadora y le ha lanzado un demoledor dardo: "Una cosa es la fundación y otra los compromisos de Ana Obregón adquiridos públicamente. Las cuentas de Ana son de Ana y a mí no me interesan para nada, y las cuentas de la fundación son las de la fundación y están más que claras" ha sentenciado en 'Vamos a ver'.

Además de negar rotundamente que haya sido él quien ha filtrado que la madre de su hijo Aless no ha donado lo que prometió -algo que la propia Obregón insinuó tras salir a la luz el escándalo- el italiano ha pedido que "no confundamos" a Ana con la fundación porque, como ha repetido en varias ocasiones, "son dos cosas completamente distintas y la funación es clarísima, cristalina". Una afirmación que sin embargo no ha hecho de su ex.

"Las cuentas de la fundación están más que claras. Los fondos se aproximan a una cantidad cercana a los cuatro millones de euros y proceden de una donación que en su día gestionó un queridísimo amigo mío, Manolo Godia. Los fondos están formados tanto por una parte en efectivo como por bienes inmuebles. Uno en la Plaza del Descubridor Diego Ordas, donde hemos fijado la sede, y otro en la calle Hermosilla. A partir de ahí, la fundación tiene fondos más que sobrados para su funcionamiento y para la financiación de los proyectos con los que nos hemos comprometido. Hasta ahora hemos financiado dos ensayos centrados en el sarcoma de Ewing, la enfermedad que tenía mi hijo, por valor de 180.000 euros" ha explicado con contundencia, sin incluir a Ana en dicha aclaración a pesar de ser la presidenta de la fundación.

Y por si quedase alguna duda, y a pesar de que la bióloga no ha aportado todavía los fondos que prometió, Lequio ha asegurado que "la fundación funciona maravillosamente bien". "Ana Obregón va por un lado y la fundación por otro, y no tiene nada que ver el compromiso que ha adquirido públicamente con el funcionamiento de la fundación" ha zanjaddo.