“Se celebre la Semana Santa con hondura y profundidad y (...) se celebren la totalidad de los cultos internos, actos litúrgicos y de piedad establecidos por las distintas hermandades y cofradías, respetando las medidas sanitarias y aforos decretados en cada momento por las autoridades competentes”. El obispo de Zamora, Fernando Valera Sánchez acaba de emitir un decreto que regula la actuación de los fieles durante la próxima Cuaresma y Semana Santa y que, entre otras cosas, permite la comunión fuera de los templos y que se pueda recibir la imposición de la ceniza el Miércoles de Ceniza.

El decreto, publicado con audiencia del vicario general, los miembros del Consejo de Gobierno Diocesano, el delegado episcopal de Hermandades y el de Religiosidad Popular y la Junta Pro Semana Santa establece que en todos los templos se respeten las medidas sanitarias y de distancia social establecidas ante la pandemia. Ordena que “se procure la celebración de la eucaristía, la penitencia y demás sacramentos con las debidas precauciones. Cuando no sea posible la participación en la eucaristía que se pueda que se pueda comulgar fuera de la misa. Los fieles tienen derecho a recibir el cuerpo de Cristo y de adorar al señor presente en la eucaristía en los modos previstos. Procúrese que se pueda recibir la penitencia, unción de enfermos y viático cuando lo soliciten los fieles ya sea en su domicilio o en los centros hospitalarios”.

Una buena ayuda son las nuevas tecnologías. De hecho el obispo exhorta a que “se usen también todos los medios telemáticos a nuestro alcance para que hagan cercanas las celebraciones a los enfermos, ancianos e impedidos”

También permite “recibir la imposición de la ceniza el día de Miércoles de Ceniza en todos los lugares donde hay culto público en la diócesis, teniendo en cuenta que este sacramental pueda ser ofrecido por los ministros previstos”,

Y propone que “los viernes de Cuaresma sean días dónde se procure la adoración del Santísimo durante toda la jornada, se habiliten espacios seguros y tiempos para la celebración de la penitencia y meditar el Santo Vía Crucis”.

La Cruz de Carne a las puertas de la Catedral cada viernes de Cuaresma

“En la Santa Iglesia Catedral el viernes de Cuaresma y el Miércoles de Ceniza se celebrará la eucaristía a las 10 de la mañana y se impartirá la bendición sobre los cuatro puntos cardinales de la diócesis en la puerta norte de la misma con la Cruz de Carne pidiendo a Dios por el fin de la pandemia”, anuncia el obispo en su decreto, una figura bastante excepcional. Con respecto a la Semana Santa el obispo manda que se celebre “con hondura y profundidad, se participe de las celebraciones litúrgicas de los misterios de la Pasión y Muerte y Resurrección de nuestro señor Jesucristo se celebre la totalidad de cultos internos actos litúrgicos y de piedad establecidos en las distintas hermandades y cofradías respetando las medidas sanitarias y aforos decretados en cada momento por las autoridades competentes”. Por último Fernando Valera se ocupa de la situación social generada por la crisis del coronavirus: “que tengan todos los fieles gestos de caridad con los más necesitados a través de Cáritas especialmente de este año de graves dificultades”.