Pero con respecto a las elecciones de 2007 habría una variación sustancial: los datos de la encuesta dejan a Adeiza sin representación en el Ayuntamiento de Zamora, al perder la mitad de los votos obtenidos hace cuatro años, cuando ya perdieron un concejal. Ahora, el porcentaje de sufragios que obtendría la dejaría lejos del 5% indispensable para empezar a sumar concejales, según la Ley D'Hondt.

Uno de los partidos de nuevo cuño, Ciudadanos, arranca con fuerza arañando un 12,2% de los votos que salen, entre otros, de los simpatizantes de los independientes que lidera Miguel Ángel Mateos y captando el descontento de los que, cuatro años atrás, votaron al Partido Popular. La lista que encabeza Francisco Requejo conseguiría tres concejales.

La mayor movilización del voto se da en el espacio político de la izquierda. El PSOE mantiene su descenso y se disputa con IU el sexto concejal que ahora mantiene, registrando un 18,8% de los votos, casi un 5% menos que hace cuatro años, cuando Manuel Fuentes optaba a la Alcaldía. Con José Luis Gómez como candidato, los socialistas todavía podrían mantener esos seis ediles y no acusar en absoluto la escisión de Decide, adonde ha ido a parar, entre otros, el propio Fuentes. La nueva formación de los críticos del PSOE se quedaría tanto o más lejos de la representación que partidos con apoyo minoritario, como el Prepal, que no llega al 0,5%.

Pero la coalición que lidera Francisco Guarido supera en intención de voto al que, hasta ahora, era la segunda fuerza mayoritaria en la capital. Izquierda Unida roza el 20% de los votos, lo que le haría sumar hasta seis concejales, si logra arrebatarle los restos a los socialistas en el recuento de sufragios.

Todavía hay otro edil que se disputa el arco político de la izquierda en Zamora: Gana Zamora, la opción emergente de colectivos como las bases de asociaciones vecinales, está a nueve décimas del 5% que le daría derecho a sillón en la Casa de las Panaderas.

A mucha más distancia, UPyD confirma el declive que la formación magenta sufre a nivel nacional, sin opciones para aspirar a concejal alguno. El informe también revela un descenso de quienes eligen otras organizaciones minoritarias, o quienes se deciden por el voto en blanco a la hora de enfrentarse a las urnas.

Todo ello en un panorama que, a tenor del estudio realizado por IPSOS, augura una mayor participación que hace cuatro años, dos puntos por encima hasta llegar al 64%. En todo caso, el bipartidismo clásico parece destinado a desaparecer también en Zamora. En el aire queda lo que hubiera ocurrido en la izquierda si alguna de esas formaciones hubiera recibido el apoyo expreso de Podemos.