A 38,5 horas semanales

CCOO reclama a Yolanda Díaz que rebaje la jornada laboral antes de verano con o sin el 'ok' de la patronal

El sindicato ve margen para que las compañías asuman el recorte de tiempo ya que la productividad por trabajador creció un 16,4% en los últimos tres años

Yolanda Díaz vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, los secretarios generales de CCOO, Unai Sordo y de UGT, Pepe Álvarez, durante la firma del acuerdo alcanzado para la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

Yolanda Díaz vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo y Economía Social, los secretarios generales de CCOO, Unai Sordo y de UGT, Pepe Álvarez, durante la firma del acuerdo alcanzado para la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). / DAVID CASTRO

Gabriel Ubieto

Las negociaciones para la reducción de la jornada laboral máxima avanzan, si bien todavía de las mesas entre el Gobierno, la patronal y los sindicatos no han relucido acuerdos tangibles. El compromiso del Ejecutivo es aplicar ya este mismo año la rebaja a 38,5 horas semanales y desde CCOO se fijan el verano como fecha límite para plasmar esas intenciones en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Mejor con acuerdo de los empresarios, pero sí o sí en el caso de que estos se acaben oponiéndo, según ha manifestado este jueves el secretario general de CCOO, Unai Sordo, en rueda de prensa. "Antes de verano habría que saber si es posible un acuerdo tripartito", ha sentenciado. El programa del Gobierno de coalición especifica que en 2024 la jornada laboral máxima será de 38,5 horas semanales y que en 2025 seguirá bajando hasta las 37,5 horas.

Desde la central consideran que el mercado laboral español se encuentra en una situación óptima y asumible para las contabilidades de las compañías para que sus empleados trabajen un poco menos y cobren lo mismo. Este jueves han presentado un informe en el que analizan la evolución reciente del empleo y en el que constatan un incipiente cambio del modelo productivo hacia un mayor valor añadido. "El modelo económico al que vamos es absolutamente compatible con la reducción de la jornada laboral", ha afirmado el líder de CCOO.

Más ingenieros, menos albañiles

La estampa que dibuja su análisis es que España está relegando la bandeja de camarero y se está 'tecnificando'. Dos de cada tres nuevos empleos creados desde el estallido del covid son de alta cualificación. Lo que se traduce, a su vez, en mejores rendimientos para la economía. Según sus datos, extraídos del observatorio de márgenes empresariales del Gobierno, la productividad real -descontado el efecto inflación- por trabajador ha aumentado un 16,3% en los últimos tres años.

Esa mejora de la productividad llega porque España está creciendo en sectores de alto valor añadido. En el último lustro los gremios que más han crecido son el de actividades profesionales, científicas y técnicas (+39%), la información y comunicaciones (+33%) y las actividades sanitarias (25%). Mientras que otros, históricamente asociados a empresas menos innovadoras y con condiciones laborales más precarias, como la hostelería (2%) o el comercio (4%), apenas han ganado volumen.

Aunque no solo aquellos sectores con más empleo cualificado están creciendo, sino que también crece el empleo cualificado en aquellos donde históricamente ha sido residual. En el último lustro en España hay empleados casi un millón más de técnicos, entre profesionales científicos y profesionales de apoyo. También 152.000 ingenieros más o 111.000 informáticos y otros profesionales TIC. Por ponerlo en perspectiva, los cajeros han aumentado en 40.000 personas o los albañiles en 75.000 ocupados.

"La evolución del empleo es inédita en nuestra historia reciente", ya que por primera vez "la mejora de la productividad por trabajador ha pasado a ser compatbile con la creación de empleo" y el protagonismo no lo están teniendo "empresas que se rentabilizaban pagando bajos salarios, pagando pocos impuestos y aportando poco valor", ha declarado el secretario general de CCOO.

Desde la central ha reclamado al Gobierno que despliegue con la máxima celeridad y eficiencia los fondos europeos, para emplearlos como palanca que siga acompañando ese cambio del modelo productivo hacia sectores más innovadores. Y le han instado a que aproveche dichos recursos para explotar al máximo la situación estratégica en terminos de energías renovables que tiene el país. "Se están repartiendo cartas nuevas en la economía mundo y es muy importante que España juegue sus bazas en términos diferentes", ha declarado Sordo.