Fútbol | Segunda RFEF

El Zamora CF se aferra a las matemáticas en su visita a Marino de Luanco

El equipo rojiblanco juega esta tarde un encuentro en el que debe ganar y esperar lo que suceda en el Pontevedra-Ourense

Zamora CF

Zamora CF / LOZ

Paz Fernández

Paz Fernández

Quedan tres partidos, 9 puntos por disputarse hasta de que concluya el campeonato regular en Segunda RFEF y las matemáticas todavía respaldan la remota opción de que el Zamora CF sea campeón de Liga y logre el ansiado ascenso directo a Primera RFEF. No va a ser fácil ya que Pontevedra y Ourense, que este domingo juegan entre ellos, están a cinco puntos de unos rojiblancos que saben que su responsabilidad es ganar y después mirar lo que hace el resto. Ahora mismo son terceros y con el "factor campo" asegurado de cara a la primera eliminatoria de ese play-off por el salto de categoría, pero en la plantilla quieren el tres de tres y apurar todas las opciones que podrían acabarse esta misma tarde noche, aunque mientras haya vida hay esperanza y en el vestuario saben que en el fútbol puede pasar cualquier cosa.

Después del empate ante el Valladolid Promesas (1-1) el Zamora CF quiere desquitarse y esta tarde medirá fuerzas con el Marino de Luanco, un plantel que lucha por alejarse del descenso directo y que a juicio de David Movilla será peligroso. El entrenador rojiblanco recordaba que su inminente rival es el tercer equipo menos goleado del grupo, por detrás de Ourense y Zamora, sin olvidar que se llevó un empate del Ruta de la Plata en el encuentro de la primera vuelta. "Hablar de claves es complicado. Nos enfrentamos a un rival muy sólido al que no fuimos capaces de ganarles como locales. Nos crearon muchísimas dificultades. Es el tercer equipo menos goleado con un nivel de fiabilidad importante. Tienen muy buen pie dentro de la categoría y la experiencia me dice que los equipos que se ganan la permanencia son más peligrosos que aquellos que luchan en cotas más altas", señaló el vasco.

Cambios en el once

Para este encuentro los cambios en el once inicial de los rojiblancos están asegurados y es que sufren varias ausencias por sanción como es el caso de Castañeda, Parra y Mancebo, además de la ya conocida de Jesús Muñoz. De este modo, David Movilla está obligado a introducir variaciones, aunque no será complicado para el entrenador que no tiene un "once tipo" a estas alturas de curso y suele cambiar a sus protagonistas. Lo que parece que está asegurado es la presencia de Fermín Sobrón como portero titular, y una primera línea que podría estar integrada por Víctor López, Luengo, Bolo y Marcé, para continuar con Juanan como enganche entre la defensa y el centro del campo. A partir de ahí, aparecen más dudas por la posible vuelta al once de Carlos Ramos, apoyado por Joel Priego y Dani Hernández, y con Luis Rivas y Cañizo como hombres más adelantados de un plantel zamorano que guardará pólvora en la recámara.

Sean quienes sean los protagonistas, el reto será la victoria, aunque antes de que su encuentro concluya ya sabrán lo que ha sucedido en Pasarón entre Pontevedra y Ourense.

Además, la parte más positiva es que el equipo no estará solo en su desplazamiento. Un grupo de aficionados consiguió sacar adelante un autobús y además habrá quien se desplace en coches particulares para animar a los suyos.

Una vez concluya este encuentro restarán dos jornadas ante Langreo a domicilio y Arandina en casa. Ambos encuentros serán en domingo, a las 12.00 horas, en horario unificado.