Lev Gonov, corredor del equipo Lokomotiv, se alzó con el triunfo en la trigésima octava edición del Trofeo Ayuntamiento tras imponerse en un larguísimo esprint de infarto en el que se vieron involucrados un total de cinco corredores, que llegaron con una ventaja superior a un minuto respecto al pelotón de la prueba. El ruso pudo llevarse una carrera definida como "muy peligrosa" por los propios participantes, en gran medida por el intenso viento que sopló durante casi toda la prueba y que es especialmente perjudicial en las carreteras zamoranas donde la estepa castellana no ofrece ningún refugio a los ciclistas.

La carrera se rompió desde los primeros compases. A partir del kilómetro 25 -de un total de 84 que completan el recorrido- un grupo de cinco ciclistas formaron un grupo de cabeza que el pelotón nunca llegó a alcanzar. Al grupo de escapados se le sumaron dos corredores más pasado el ecuador de la etapa. Fue el propio Lev Gonov, quien posteriormente se proclamaría campeón del Trofeo Ayuntamiento, e Iván Martínez, corredor del equipo Froiz, quienes conseguirían dar caza a la cabeza de carrera y mantenerse en liza hasta la línea de meta.

El viento fue sin duda un elemento principal, por no decir protagonista, durante todo el transcurso de la prueba. El propio Martínez indicó que la fuerza de la inclemencia meteorológica provocó "numerosas caídas". Las carreteras que conformaban el trayecto tampoco ayudaban mucho: el pelotón era demasiado grande para las dimensiones de la vía y la falta de refugio, fruto de nuestra llana orografía, unido al viento de cara propició alguna que otra caída. Por otro lado, este mismo viento favoreció la llegada desde Almaraz, cuando el trayecto cambia de dirección y el viento favorece la trazada.

Finalmente, tras superar el puerto de "Los Infiernos" -ubicado en las postrimerías del recorrido- los ciclistas han regresado al casco urbano y en el esprint final el ruso Lev Gonov se ha impuesto por milésimas a Julián Barrientos (Rías), Ibon Ruiz (Liza) e Iván Martínez (Froiz).