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Liga EBA

El Innova Chef sufre en su feudo para volver a la cima

Un mal primer cuarto dificulta el triunfo ante KFC-Culle y el salto hasta el coliderato del grupo

Innova Chef - Culleredo

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El Innova Chef regresó ayer a la competición tras el parón navideño con una sufrida victoria en casa ante el KFC-Culle. Un rival que, gracias a un gran comienzo de partido, resistió más de lo previsto a la reforzada escuadra de Menéndez.

Con la incorporación de Javier Nasarre y de Bohomme, el Innova Chef volvía a las pistas dispuesto a reanudar la positiva trayectoria que firmó a finales de 2018. De hecho, abrió el partido con un triple y mostraba gran ímpetu en pista. Sin embargo, se obcequó en tirar desde el perímetro y eso permitió a KFC-Culle tomar el mando del choque en el primer cuarto. Un hecho que lamentarían los zamoranos durante el resto del duelo.

Los visitantes abrieron el partido siendo letales desde el exterior y con un parcial de 3-11 forzaron al Innova Chef a trabajar más de lo previsto. Los locales aceptaron el reto pero el primer cuarto terminó con una clara ventaja de siete puntos para KFC-Culle. Una renta que le dio energías para luchar hasta el último segundo del envite.

A pesar de disputarse un segundo periodo bien distinto, con claro dominio del Innova Chef, las diferencias pasaron a ser mínimas en el luminoso pues el cuadro de Menéndez no terminó de arrancar. Eso sí, a partir del tercer minuto de este cuarto el tanteo siempre perteneció a los zamoranos, que llegaron al descanso con un único punto de renta (33-32).

A la vuelta de vestuarios, Innova Chef trató de romper el partido a su favor pero KFC-Culle se había crecido y, enganchado al talento de Bulashvili y un gran Woods, sacaba petróleo de cada fallo en el bando aurinegro. Hasta el punto de, sin grandes alardes, entrar al último cuarto manteniendo ese único punto de desventaja.

En los últimos diez minutos se mantuvo el guión del periodo anterior, con el Innova Chef alcanzando los cuatro o cinco puntos de renta para perderlos instantes después hasta entrar en el último minuto de partido con tres puntos de ventaja gracias a la buena labor de Ukawuba. Una distancia que acabó por ser suficiente gracias al acierto de Dillard desde la línea de personal.

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