La ilusión, esa que se tiene casi siempre que uno se embarca en una nueva aventura, se asocia tradicionalmente con el color azul. Un tono que luce desde hace años un CD Villaralbo que ayer empezó a andar repleto de ganas y con mucho entusiasmo por firmar una buena temporada en el Grupo VIII de Tercera División bajo la mano de Chus Benito.
Hubo nervios y bromas al inicio de la jornada ayer en el equipo villaralbino, especialmente tras posar con las nuevas equipaciones para la prensa y volver al vestuario para afrontar el primer entrenamiento. Entonces, la quincena de futbolistas dejó aflorar la motivación natural en un grupo de jóvenes ansiosa por ganarse la confianza de su técnico y llegar en las mejores condiciones al inicio liguero.
Para estrenarse y convertir esa ilusión en resultados, el CD Villaralbo deberá esperar apenas un mes. Tiempo en el que tiene mucho trabajo por delante, como queda claro con la planificación que Benito ha preparado para el equipo.
La pretemporada "azulona" contará con cuatro o cinco entrenamientos a la semana, además de tener ya fijados una buena serie de partidos para ir puliendo detalles y que el grupo se acerque a la idea que el cuerpo técnico tiene en mente. "Un equipo incómodo", según señalaba ayer su entrenador.
Así pues, serán claves los amistosos fijados ya por el CD Villaralbo para su evolución. Un calendario de encuentros preparatorios que arrancará el día 6 de agosto frente al Santa Marta en tierras charras y que tendrá continuidad con otros tres envites: el día 10 en Fresno de la Ribera frente al conjunto de Regional de Aficionados, el 13 de agosto frente al Benavente en el Fernández García, y el día 15 ante la UD Toresana en un choque que se jugará a beneficio de la Cruz Roja en la localidad toresana.
Chus Benito espera que estos cuatro duelos sean suficientes para definir a una plantilla que, según destacó, "cuenta ahora mismo con jugadores con las características que se buscaban, con responsabilidad y compromiso". Aunque, el técnico no escondía que "no está compensado" y faltan "algunos jugadores por llegar, como un par de centrales que aporten algo de experiencia a la zaga". Fichajes como el de Alberto García, último en llegar al CD Villaralbo.
El salmantino, de 23 años de edad y procedente del Ciudad Rodrigo, espera que sus ganas le otorguen peso en el ataque del equipo en cualquiera de las posiciones que puede ocupar, tanto en banda como en la media punta.
Esas ganas son las que espera Chus Benito y su cuerpo técnico de todos los jugadores ya que para él, "la intensidad y el compromiso es imprescindible". "Tenemos que ser un equipo que juegue siempre al 100%, incluso al 120%, bien ordenado y ser incómodo para todos los rivales", destacaba. Y es que, pese al complicado inicio de liga, si el CD Villaralbo consigue convertir en fútbol la ilusión que reflejan sus nuevas equipaciones, serán los adversarios los que sufrirán en el arranque de temporada.
