Carlos Garrote superó ayer con éxito y sin demasiados problemas su debut en el Campeonato del Mundo de Aguas Tranquilas en categoría Sub-23 que se está disputando en Canadá. Una cita en la que el zamorano aspira a poder colarse en la final y, por qué no, luchar por un metal en su categoría.
Garrote, que participa en la modalidad de 200 metros de la disciplina de K-1, se estrenó en Wellan en la tercera manga contrarreloj de la fase clasificatoria en la que tuvo como principales rivales al checo Dostal y al americano Dolan.
El componente de la ADZ, que tenía que acabar entre los seis mejores de su serie o lograr uno de los tres mejores tiempos de la primera ronda, alcanzó su objetivo con relativa facilidad. Garrote firmó un registro de 39.021 sobre aguas canadienses en una regata que fue más fácil de lo esperado para él y en la que acabó siendo segundo por detrás de Josef Dostal.
El checo se encontró con la victoria, que obtuvo por 192 milésimas, tras una regata plenamente dominada por Garrote, cuyo descomunal inicio le permitió navegar en cabeza gran parte de la distancia.
El norteamericano Dolan trató de aguantar su ritmo y, cuando Carlos buscó ahorrar fuerzas, peleó por un triunfo que se llevó Dostal por la calle uno viniendo desde atrás lejos del control de sus otros rivales.
Con este resultado Carlos Garrote se hace así un hueco en la semifinal del K-1 200 metros, donde intentará dar un paso más y disputar la gran final de su categoría. Un logro que sería todo un éxito y reafirmaría la buena dirección que lleva el zamorano en su preparación de cara al Mundial Sénior de Aguas Tranquilas que se celebrará en Duisburg en unos días.
