El tenista español Rafa Nadal defenderá su triunfo en el Abierto de Australia, primer 'Grand Slam', donde el suizo Roger Federer lidera la lista de adversarios con opciones de impedirle el doblete.

Nadal debutará en Australia abriendo el turno de tarde en el Rod Laver Arena (09.00 hora española) en el duelo que le medirá al jugador local Peter Luczak, en una jornada inaugural que también pondrá en liza a otros tres españoles y a favoritos como Andy Murray o Dinara Safina.

La Rod Laver Arena, la pista central del Abierto de Australia, registró su primer lleno este año, un día antes de que el primer Grand Slam de la temporada de comienzo, al reunir a aficionados y jugadores con un objetivo común, recaudar fondos para las víctimas del terremoto que ha asolado Haití.

Se recaudaron 159.000 dólares australianos, cantidad a la que hay que sumar medio millón más procedente de las donaciones de los circuitos ATP y WTA, la Federación Internacional de Tenis, el Comité del Grand Slam, y la Federación Australiana. Todo el dinero recaudado fue enviado a la fundación de caridad "Compañeros en Ayuda" de Haití.

El suizo Roger Federer cumplió su objetivo y animó a todos los jugadores posibles para participar en esta exhibición. "Ayer (sábado) por la mañana pensé que deberíamos hacer algo y en menos de 24 horas hemos sido capaces de sacarlo adelante", dijo Federer, "estoy feliz porque ha sido un éxito, y muy divertido para nosotros los jugadores, y todo un espectáculo".

El serbio Novak Djokovic, el estadounidense Andy Roddick, la belga Kim Clijsters, y Rafa Nadal formaron el grupo Azul, mientras que Federer, los australianos Lleyton Hewitt y Samantha Stosur, y la estadounidense Serena Williams se agruparon en el Rojo. Jim Courier, ganador en 1992 y 1993, y analista de televisión, actuó como juez de silla.

Se echo de menos a Maria Sharapova, ganadora del torneo en 2008, que faltó el pasado año por lesión, y que debuta mañana ante su compatriota Maria Kirilenko, pero la rusa contribuyó a la causa enviando un cheque de 10.000 dólares.

Los jugadores, provistos de auricular y micrófono, se repartieron en minipartidos de dobles y mixto haciendo las delicias de los 17.000 aficionados que llenaron la central, con sus chistes y comentarios.

Hubo un momento en el que seis jugadores, tres por bando, saltaron a la pista, y quizás el más delirante se produjo cuando Federer intercambió golpes cruzados con Nadal, imitando la forma de golpear la bola y también los gruñidos del español. Clijsters entró en ese guiño a los espectadores cuando acudió solícita a dar un pequeño masaje en las piernas de Rafa, y el joven australiano Bernard Tomic se unió como último invitado a esta exhibición que ganó el Grupo Rojo por 7-6.

Una pareja de ciudadanos haitianos saltó al final a la pista con una bandera de su país para agradecer personalmente a los jugadores y al público su aportación.