Cala Bona (Mallorca).- El ciclista español Isaac Gálvez, del equipo Illes Balears/Caisse D´Epargne, volvió a ser el más rápido en la llegada masiva de la segunda prueba de la Vuelta a Mallorca, carrera que da por terminada para seguir su preparación de la temporada en el Tour del Mediterráneo a disputar del 8 al 12 de febrero.

Gálvez remató a la perfección un sensacional trabajo realizado por la totalidad de sus compañeros y en especial en el tramo final del ruso Alexei Markov que realizó una espectacular remontada llevando a Gálvez a su rueda y poniéndole la victoria en bandeja.

No fue nada fácil el triunfo del español, pues enfilaron la recta final corredores de similares cualidades, especialmente el italiano y campeón olímpico Paolo Bettini, que fue el que lanzó el esprint, pero poco pudo hacer ante el trabajo del Illes Balears que remató a la perfección Gálvez invirtiendo en los 159,4 kilómetros 3 horas, 45 minutos y 54 segundos.

La jornada volvió a ser un calco de lo sucedido en la primera, pues Gálvez imponía su clase, pero el protagonismo lo volvieron a acaparar equipos modestos, los debutantes en las categorías profesional y continental, los que animaron la jornada y destacar que ilustres como los españoles Alejandro Valverde -último vencedor- y Oscar Freire -tres veces campeón del mundo- y el italiano Gilberto Simoni no participaron.

Un comienzo rápido, como en la anterior, con prácticamente los mismos protagonistas, pues hacia el kilómetro 39 se fueron los españoles Israel Núñez (Kaiku) y Adolfo García Quesada (Andalucía Paul Versan).

La aventura de Núñez y García Quesada llegaba a su fin a falta de poco más de una treintena de kilómetros comenzando otra carrera, pues llegaba la hora de la verdad. Ataques y más ataques que no fueron a ninguna parte, ya que ningún equipo dio muestras de tener claras las ideas en los metros finales.

Los primeros en romper el fuego en esa parte final volvieron a ser los equipos modestos, con Relax Gam, Kaiku y el Andalucía Paul Versan, que por algunos momentos pensó en que Luis Pérez podía llegar en solitario. En el tramo final los esprinters no escatimaron esfuerzos y aprovechando las largas rectas y giros complicados neutralizaron las fugas para jugarse la victoria en una llegada masiva en la que Gálvez fue el más rápido.