Julián Madrigal Alonso ha cumplido cien años. Natural de Peque, donde trabajó en agricultura y como vendedor ambulante de mantas por los pueblos de la zona, el anciano ha recibido un homenaje del Ayuntamiento de Peque y sus vecinos por los redondos cien años que acaba de cumplir.
Viudo desde 1982, el anciano es padre de tres hijos, seis nietos y tres biznietos. Parte de su familia ha acompañado a Julian Madrigal en la celebración de los cien años y el homenaje, tanto del pueblo de Peque como de la Residencia de Mombuey, su actual hogar.
Teresa María Garrao, alcaldesa de Peque, destacó la vida de "sacrificio" de Julián y las "duras faenas en el campo". Para desearle después que siga "con esa alegría, cantando, bailando y jugando a las cartas". El anciano recibió una placa de recuerdo de manos de la alcaldesa de su pueblo.
En la Residencia de Mombuey, el anciano sopló las cien velas y compartió una tarta con el resto de los residentes y el personal del centro.