Almeida vuelve al Carnaval con la vaca bayona

La Asociación de la Vaca Bayona de Almeida organiza el décimo segundo encierro dentro de las fiestas patronales

Participantes en la performance de la vaca bayona . | P. P.

Participantes en la performance de la vaca bayona . | P. P. / P. P.

P. P.

El marco de las fiestas de Nuestra Señora y San Roque, Almeida de Sayago ha celebrado el encierro de vacas bayonas, una performance que tiene como motivo las vacas del Carnaval tradicional de la localidad. Es esta puesta en escena que se celebra desde el año 2009 impulsada por la Asociación de la Vaca Bayona de Almeida.

En la edición de este año han salido cuatro vacas para que las corran adultos y dos de formato infantil. El encierro consiste en que se simula la salida de las vacas de un corral próximo a la Plaza Mayor hasta la que llegan persiguiendo a la chiquillería que corre con las vacas en un juego de provocaciones y envestidas ficticias.

Encierro de las vacas bayones, ayer en Almeida de Sayago. | P. P.

Encierro de las vacas bayones, ayer en Almeida de Sayago. | P. P. / P. P.

La presidenta de la asociación, Laura Cardeñosa, cree que esta iniciativa derivada del rito es positiva por dos razones. La primera, porque se produce una sinergia entre la corporación municipal y la asociación en torno a un elemento cultural muy querido.

La segunda, porque estos días son las fechas en las que el pueblo tiene más población porque los emigrados, sus hijos y sus nietos regresan a la tierra de sus mayores y se da a conocer una tradición local que se perdió en los años noventa y se recuperó en 2005, impulsada por Bernardo Calvo Brioso. La actividad es lúdica y congrega principalmente a los niños, pero también a cualquier adulto que desee unirse al jolgorio.

Para esta recreación de introducen elementos nuevos en relación a la mascarada carnavalesca como los vivas a San Roquín por imitación de otros modelos de encierros muy mediáticos, mientras que se eliminan otros como el vaquero o gañán y el sembrador que, en palabras de Pilar Panero, profesora de antropología en la Universidad de Valladolid y autora de un ensayo sobre la etnohistoria de esta mascarada sayaguesa, eran centrales en la mojiganga antigua. El primero ayudaba a la vaca en sus desmanes, aunque, en teoría debía controlarla; mientras que el sembrador asimilado al antiguo pelele "Pedro Pajas" estaba relacionado con ritos agrarios arcaicos de siembra de la nueva simiente.

Este formato nuevo ofrece la posibilidad de valorizar el patrimonio cultural a través de un producto que se construye especialmente para el disfrute infantil, mientras que en la mascarada tradicional las comunidades que participaban en su totalidad y el protagonismo recaía en el colectivo de los mozos. Para la autora este cambio desde el rito a la performance es lo más relevante, si bien se adapta a la modernidad para sobrevivir.

Suscríbete para seguir leyendo